La OCU advierte de que algunos modelos de Seat León, Tarraco y Formentor pueden arder por un chip defectuoso

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) lanzó una advertencia a los propietarios de algunos modelos de Seat tras haber detectado varios fallos de seguridad que podrían provocar cortocircuitos que hagan arder el coche. Se trata de varios modelos de Seat León, Tarraco y Formentor, fabricados entre septiembre del 2020 y enero del 2022, en los que se ha detectado un fusible defectuoso que podría causar un cortocircuito.

Desde Seat confirman que han detectado un fallo: «Durante sus exhaustivas inspecciones, Volkswagen ha descubierto que un fusible del sistema de propulsión de algunos vehículos híbridos enchufables puede tener defectos en casos concretos», explican desde la automovilística, que aseguran que «en casos excepcionales» sería posible que este fusible no funcionara correctamente en caso de sobretensión: «Por ello, como parte de la llamada a revisión, se instala una alfombra aislante como medida de precaución».

A través de un comunicado, la OCU explica que el sistema de alerta rápida de productos peligrosos no alimentarios de la Unión Europea (Rapex) ha detectado este fallo en los modelos Seat León y Seat Tarraco fabricados entre el 18 de septiembre del 2020 y el 10 de enero del 2022: «OCU entiende que Seat se irá poniendo en contacto con los propietarios para resolver el problema, que deberá hacerse de forma gratuita y lo antes posible». Además, desde la organización recuerdan que aquellos que compraran un coche de segunda mano o hayan cambiado su domicilio habitual tendrán que pedir cita al fabricante para que solucione el problema cuanto antes. 

Desde Seat calculan que hay unos 27.149 vehículos afectados de las marcas Seat y Cupra; mientras que en la OCU aseguran que el problema podría afectar a hasta 17.500 vehículos comercializados en España: 15.000 Seat León y 2.500 Seat Tarraco.

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