Sánchez rechaza la petición de sus socios para suprimir la inviolabilidad del rey
ACTUALIDAD
ERC acusa al PSOE de ser «republicano en campaña y monárquico en Moncloa»
25 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El viaje de Juan Carlos I a España sigue coleando. La vuelta del rey emérito a Abu Dabi tras su estancia en Sanxenxo y su paso por Zarzuela no ha servido para dar carpetazo a un tema que vuelve a evidenciar la soledad del PSOE en el Congreso, que quedó una vez más patente en la sala de prensa, por donde cada martes acostumbran a desfilar los portavoces de cada grupo.
Por un lado, tanto sus socios de coalición como sus aliados parlamentarios exigen a los socialistas que apuesten por acabar con la «inviolabilidad» del rey que recoge la Constitución. Por el otro, las fuerzas de la oposición le acusan de contribuir a la erosión de la Corona. Mientras tanto, en el Gobierno continúan demandando al anterior jefe del Estado explicaciones sobre sus «conductas poco ejemplares», insistió ayer la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, «una dación de cuentas» sobre la que la Moncloa no alberga grandes esperanzas en que acabe llegando.
Sin embargo, tanto sus socios de coalición como en el Congreso advierten de que esos comportamientos podrían volver a repetirse en cualquier momento en caso de que no se modifique la Constitución para poner fin a la inviolabilidad del jefe del Estado. El portavoz de Podemos, Pablo Echenique, lamentó que esta situación de «impunidad» continúa vigente con el actual titular de la Corona. Íñigo Errejón anunció ayer que volvería a presentar una proposición de de ley para acotar la inviolabilidad a ciertos ámbitos. El líder de Más País se agarró a unas palabras pronunciadas por Sánchez el pasado octubre en las que se abría a impulsar esta revisión del título II de la Carta Magna, al entender que esa «condición» del rey era «producto de otra época». Sin embargo, en el PSOE volvieron a dejar claro ayer que no quieren abrir un melón para el que, además, necesitarían el apoyo del PP, ya que la modificación de este apartado de la Carta Magna requeriría de los dos tercios de la Cámara, de la disolución de las Cortes, de la correspondiente convocatoria electoral y de la celebración de un referendo aprobando el cambio. «No contemplamos abrir ese espacio», reiteró ayer su portavoz en la Carrera de San Jerónimo, Héctor Gómez.
ERC denuncia un doble juego
Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, acusó a Sánchez y al PSOE de jugar a un doble juego, «haciendo de republicano en campaña y de monárquico en Moncloa». El diputado independentista señaló a «Juan Carlos» como «el mejor republicano que tiene este país». En EH Bildu, otro de los socios decisivos del Ejecutivo en esta legislatura, también denunciaron la postura del PSOE respecto a la Casa Real. «Cada vez que se pregunta algo hay un muro enorme que no hay forma de traspasar. A esa impunidad del rey se le suma la impunidad que se le da desde el propio Congreso», dijo Mertxe Aizpurua, en relación a las continuas negativas del grupo socialista en la Cámara Baja para abrir una comisión de investigación sobre el emérito.
Miriam Nogueras, de Junts, tachó a Juan Carlos I de «ladrón», el mismo término empleado por Alberto Garzón, el ministro de Consumo, apenas 48 horas antes. La diputada secesionista también señaló al PSOE como el principal sostén de «la monarquía corrupta». Joan Baldoví, de Compromís, también cargó contra los socialistas por seguir «salvándole de las comisiones de investigación». En la Cup se mostraron en términos muy similares: «Puede robar lo que quiera», afirmó la diputada Mireia Vehí tras llamarlo «chupóptero».
En Ferraz demandan explicaciones, pero tampoco quieren que el Congreso se convierta en el escenario, por lo que Gómez también rechazó un cambio del PSOE sobre la apertura de una comisión de investigación. Asimismo, lamentó la «oportunidad esdrújula y mayúscula» desperdiciada por Juan Carlos de Borbón este fin de semana.
El PP reprocha al PSOE que reclame las explicaciones que no exige a sus aliados
Tras varios días mostrando públicamente su apoyo a la visita del rey emérito, las fuerzas de la oposición también coincidieron ayer en mostrar su visto bueno a una hipotética vuelta de Juan Carlos I para afincarse en España de forma definitiva. El argumento al que recurrieron fue el mismo: no tiene causas pendientes con la Justicia, por lo que es libre para hacer lo que considere oportuno.
La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, afirmó ayer que el comunicado distribuido a última hora del lunes por la Casa Real en el que se desliza su posible regreso le parece «correcto». «Es un español sin causas pendientes, que puede tomar sus decisiones libremente», defendió. la secretaria general del PP.
Su homólogo en el Senado, Javier Maroto, ratificado este fin de semana como portavoz del grupo popular, acusó a Pedro Sánchez de emplear una doble vara de medir sobre las explicaciones requeridas a Juan Carlos de Borbón y la ausencia de las mismas a sus aliados, tanto en el Ejecutivo como en el Congreso de los Diputados: «Lo que (Sánchez) exige para todos los demás no lo aplica ni si quiera con él mismo, con miembros del Gobierno o con sus socios parlamentarios», señaló en TVE, recordando que el rey emérito no tiene ninguna causa pendiente con la Justicia, algo que «no sucede con algunos socios de Sánchez. Consejos vendo, pero para mí no tengo», criticó.
Vox pide otras explicaciones
En el mismo sentido, el portavoz de Vox, Iván Espinosa, defendió que Juan Carlos I tiene «perfecto derecho a estar España» y a «entrar y salir cuando lo desee». Sobre las explicaciones, Espinosa de los Monteros cree que sí serían importantes, pero siempre y cuando estas se centraran en su contribución a la consolidación de la democracia en España:
«En la izquierda hay mucho ignorante y en los jóvenes mucho desconocimiento», apuntó el dirigente del partido liderado por Santiago Abascal.