Downing Street niega que Johnson presionara para cerrar la investigación del Partygate que él ordenó
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La BBC asegura que «los vinos de los viernes» eran fiestas que dejaban los cestos de la basura llenos de botellas
25 may 2022 . Actualizado a las 09:00 h.El primer ministro británico, Boris Johnson, no presionó a la subsecretaria de la Oficina del Gabinete, Sue Gray, para que desechara el informe que elaboró sobre el Partygate. Así lo aseguró el portavoz de Downing Street, quien este martes negó que la entrevista que el premier conservador mantuvo, a principios de este mes, con la investigadora haya tenido como propósito bloquear la publicación de la indagación sobre las fiestas ilegales celebradas en sedes gubernamentales durante los confinamientos por la pandemia, algo que se espera que ocurra este miércoles.
«El primer ministro no le pidió a Gray que desechara sus investigaciones o que no procediera a publicar el informe», dijo el portavoz. «Fue el primer ministro quien encargó la investigación y es él el primero que quiere que se publique el informe», agregó.
En su edición de este martes, el diario londinense The Times aseguró que el premier le habría dicho a Gray que «no había necesidad» de hacer público el resultado final de sus indagaciones, en virtud de que el grueso de la información ya ha trascendido.
Más revelaciones
El Partygate ha resurgido esta semana con fuerza. Así tras la revelación el lunes de una fotografía donde se ve a Johnson brindando en una fiesta celebrada en noviembre del 2020, la BBC aseguró que muchas de las reuniones ocurridas en Downing Street eran celebraciones en el sentido más amplio de la palabra, en las cuales se bebía, se comía y se bailaba y que dejaban tras de sí «los cestos de la basura rebosantes de botellas medio vacías y de vasos».
La cadena pública consiguió que tres funcionarios de la sede donde vive y trabaja el primer ministro británico hablaran en condición de anonimato sobre las fiestas para Panorama, uno de sus programas estrella.
Estas nuevas revelaciones han reavivado el malestar en las filas del gobernante Partido Conservador, donde ya son quince los diputados que han pedido públicamente a Johnson que renuncie. Asimismo, han hecho que el alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan, exija públicamente a la Policía Metropolitana de Londres que explique por qué no multó al mandatario y sí a otros de los asistentes a la reunión que fue inmortalizada en la fotografía que este martes estaba en las primeras páginas de casi todos los diarios.