Las FDS piden una alianza a Damasco para rechazar una posible invasión turca del norte de Siria

Agencias MADRID / LA VOZ

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Vista de la Mezquita de los Omeyas en Damasco.
Vista de la Mezquita de los Omeyas en Damasco. Gianluca Pardelli

Los kurdos temen graves consecuencias humanitarias si dicha agresión se produjera

07 jun 2022 . Actualizado a las 13:09 h.

Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), la alianza armada liderada por kurdos que constituye el principal aliado de Estados Unidos en el país árabe, ofreció hoy a las fuerzas leales al presidente Bachar al Asad coordinarse ante la ofensiva anunciada por Turquía en el norte. Los líderes de las distintas facciones y consejos de las FSD manifestaron en una reunión extraordinaria su «disposición para coordinarse con las fuerzas del Gobierno de Damasco para repeler cualquier posible ataque turco y proteger las tierras enfrentando la ocupación», indicó la coalición en un comunicado recogido por Efe.

El encuentro fue celebrado para abordar las últimas amenazas realizadas por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, de llevar a cabo una incursión militar sobre varias zonas del norte de Siria, algunas de ellas bajo control de los kurdosirios, en la que sería su cuarta ofensiva en este país desde el 2016.

Las Fuerzas de Siria Democrática, que toman muy en serio este anuncio, expresaron su preocupación que dicha acción tendría sobre la situación humanitaria en el norte y este sirios y advirtieron en el comunicado que «llevaría a los sirios al punto de partida de la crisis siria». La campaña anunciada por Turquía, que pretende ampliar las zonas bajo su control en Siria con el objetivo de crear una «franja de seguridad» de 30 kilómetros de profundidad a lo largo de toda la frontera común, «afectará a la estabilidad y la unidad» de toda Siria y es «un preludio de la división» del país, auguraron.

Las FSD reiteraron que el grupo terrorista Estado Islámico sacaría partido de la nueva intervención turca como ha pasado, dijeron, en las anteriores, y dijeron que su prioridad es la desescalada en las zonas de distensión pactadas en el 2018 y su compromiso con esos acuerdos, de los que fueron garantes Rusia, Irán (ambos aliados de Damasco) y la propia Turquía. El Gobierno de Al Asad también ha condenado las amenazas de Erdogan, que ha calificado como una violación a su soberanía que socava los acuerdos de desescalada alcanzados hasta ahora.