La asombrosa colección de bolsas de tiendas

ACTUALIDAD

-

Fernando Pujalte, hermano de la actriz María Pujalte, guarda como un auténtico tesoro estos artículos de míticas tiendas gallegas

25 jun 2022 . Actualizado a las 10:22 h.

Forman parte de nuestras vidas. Al menos para varias generaciones de gallegos nacidos en el siglo XX. Quién no ha visto en su casa una de esas bolsas. Algunos recordarán a sus padres con una, y otros haberlas llevado. Entonces, el plástico era un amigo. Nadie podía suponer que en el futuro se iban a convertir en un peligro para nuestro planeta. «Me las fui encontrando. Busco en las casas objetos de los 60 y 70, que ahora llaman vintage, porque es lo que me gusta. Como lo saben, me llaman amigos y me acerco. Lo de las bolsas no fue algo premeditado. No me lo planteé como una colección. Pero un buen día encontré las de Barros y El Pote, que en otros tiempos eran grandes competidores comerciales en A Coruña, y las fui guardando. Están apareciendo cantidad de ellas en armarios empotrados, que había muchos en aquella época», comenta sonriente Fernando Pujalte, hermano de la actriz María Pujalte. 

DESDE SALDOS ARIAS A CHAVALÍN

Es un apasionado de la música, el cine, de A Coruña y el pasado. Muchos lo conocen como Lili, y de vez en cuando monta un show con la ayuda de un triciclo antiguo que compró en Suances, Cantabria, y que bautizó como Lilicleta. A partir de ahí hace proyecciones, sesiones de disyóquey y convierte el vehículo en discocleta, cinecleta, o musicleta. Así es Fernando, el coleccionista de bolsas de tiendas de siempre que reconoce que «cuando vi la de Saldos Arias me emocioné». Es una de sus joyas plásticas. La de Chavalín indica todos los lugares donde tenía establecimientos: Vigo, A Coruña, Ourense, Oviedo y Salamanca. Lo mismo ocurre con la de Barros y su inconfundible combinación de colores negro, blanco y amarillo. Junto al logotipo figuran las ciudades gallegas en las que estaban presentes, y otras como León. En la de For, negocio especializado en gabardinas, trincheras e impermeables, aparecen las direcciones de las cinco tiendas que llegaron a regentar en el centro de A Coruña. «Tengo más, como por ejemplo del hipermercado Continente, que así se llamaba antes de convertirse en Carrefour, pero es algo menos vintage. La más antigua posiblemente sea la de electrodomésticos Docampo. También es la que más aprecio», analiza. Seguro que ustedes tienen en casa algunos de estos curiosos tesoros que se conservan muy bien. «Está claro eso que dicen de que los plásticos duran una eternidad. Llegará un momento en que estarán mal vistos, pero yo sigo llevando algunas de esas bolsas cuando hago shows y las regalo a la gente», sentencia Pujalte. 

LA EMPANADA VIAJERA

Con la calma de quien tiene tanto trabajo como veteranía, el cocinero Pablo Pizarro fue colocando las dos piezas calentitas en una caja de cartón. Por fuera, en letras grandes, la imagen de su negocio, La Empanada Viajera. Desde hace unos meses cuenta con un obrador en el que vende al público y, al mismo tiempo, despacha empanadas a media España. A algunos lugares las envía congeladas o a medio hacer con las instrucciones precisas para que no pierdan un ápice de su sabor al hornearlas. Pero yo me las llevé humeantes para que las probasen un grupo de amigos. Viajé con la empanada y triunfé.