El «premier» presentará una moción contra su Gobierno la próxima semana
14 jul 2022 . Actualizado a las 09:06 h.La primera votación para elegir al sucesor de Boris Johnson como líder del Partido Conservador y primer ministro del Reino Unido ha dejado pocas sorpresas. El exministro de Economía Rishi Sunak ganó de manera cómoda esta primera ronda celebrada este miércoles al obtener el respaldo de 88 diputados tories frente a 67 de su más cercana rival, la secretaria de Estado de Comercio, Penny Mordaunt.
El exministro de Salud Jeremy Hunt, quien disputó el liderato a Johnson en las primarias del 2019, y el actual responsable de las cuentas públicas, Nadhim Zahawi, quedaron eliminados al no lograr el respaldo de al menos 30 parlamentarios. Zahawi consiguió 25 y Hunt, 18. En la segunda votación, prevista para este jueves, participarán seis aspirantes. La lista la completan la ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss; la exsecretaria de Estado de Igualdad Kemi Badenoch; el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de los Comunes, Tom Tugendhat, y la fiscala general Suella Braverman.
Los resultados de Truss, quien terminó en tercer lugar con 50 votos, han sorprendido. Hasta no hace mucho la jefa de la diplomacia británica era vista como gran favorita para reemplazar a Johnson, junto a Sunak. Mordaunt, por su parte, es muy apreciada dentro del partido, pero tiene un gran problema: es una gran desconocida para los electores. Solo el 11 % de los británicos es capaz de identificar a la aspirante a líder conservadora si le colocan su fotografía al frente, según reveló una encuesta de la empresa Savanta ComRes.
Un giro inesperado
Mientras, el dimisionario premier volvió a sorprender. Johnson anunció este miércoles su intención de presentar a la Cámara de los Comunes una moción de confianza contra su propio Gobierno. Lo hace en respuesta a las críticas por bloquear otra que presentó 24 horas antes el Partido Laborista.
A diferencia de la que la formación opositora introdujo, esta nueva moción no menciona directamente a Johnson. Con esta jugada el mandatario saliente espera obligar a su propia bancada a apoyarlo en sus momentos finales. De lo contrario, se abriría la puerta a unas elecciones generales anticipadas, una opción no deseada en su partido, por cuanto las encuestas les vaticinan una estrepitosa derrota. La jugada gubernamental será debatida y votada el lunes, según anunció el portavoz de Downing Street.
Johnson y Starmer se vieron las caras este miércoles en la penúltima sesión de control al Gobierno, pero el asunto de la moción no salió a relucir en el careo. El opositor usó su intervención para burlarse de Johnson, a quien dijo: «Ya podrá olvidarse de seguir las leyes». Asimismo, apuntó al «nuevo Gabinete», que «el miércoles estaba juramentándose y el jueves le estaba pidiendo al primer ministro que se fuera», dijo.
El premier, por su parte, replicó diciendo que se irá «pronto con la cabeza en alto». «La economía está hoy mejor y estamos ayudando a 8 millones de hogares vulnerables», argumentó.
Tras asegurar que «extrañaría los sinsentidos» de Johnson, Starmer arremetió contra los candidatos tories, especialmente contra Sunak, aunque sin mencionarlo, por no pagar impuestos o no presentar sus ingresos y bienes.
La sesión comenzó con mal pie. El presidente de la Cámara, Lindsay Hoyle, tuvo que ordenar sacar a dos diputados escoceses, que comenzaron a increpar al mandatario por su negativa a permitir un segundo referendo sobre la independencia de la región.