La mujer despegará hacia la Luna, medio siglo después que el hombre

L. R. REDACCIÓN / LA VOZ

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La NASA arranca este lunes su ambiciosa misión Artemis que coronará en el 2025

29 ago 2022 . Actualizado a las 14:45 h.

Cincuenta y tres años después de que la misión Apolo 11 enviase a la Luna al primer ser humano, un hombre, la hermana gemela de aquel dios griego —Artemis III— da nombre al proyecto espacial que transportará al satélite terrestre a una mujer. Artemisa arranca este lunes sus ensayos varios para cumplir ese objetivo en el 2025, cuando —si todo sale según lo previsto— la NASA cubrirá las cuotas de diversidad en la superficie lunar poniendo en órbita a la primera astronauta y también «a la primera persona no blanca».

El primer paso lo darán el potente cohete SLS —y la cápsula Orión en su cúspide—, que esperan el fin de la cuenta atrás para despegar esta mañana desde Cabo Cañaveral, en Florida, y emprender un histórico viaje sin tripulación a la Luna, el satélite terrestre que no recibe una visita de este tipo desde el fin del programa Apolo, como recuerda Efe desde Miami.

Si todo sale como está planeado, a las 8.33 de la mañana, hora local (12.33 GMT), el cohete será lanzado desde la plataforma 39B del Centro Espacial Kennedy de la NASA, y la misión Artemis I comenzará un viaje de seis semanas, en el que llegará a ubicarse a más de 450.000 kilómetros de distancia de la Tierra antes de emprender una vuelta que culminará en el Océano Pacífico.

Se espera la presencia de la vicepresidenta Kamala Harris, además de celebridades como los actores Jack Black y Chris Evans, para el lanzamiento de esta misión que supone el pistoletazo de salida del programa Artemis, con el que la NASA abre un nuevo capítulo en la exploración espacial marcado por el establecimiento de una base lunar y el envío de una tripulación a Marte.

Artemis toma el relevo del programa Apolo, cuya última misión, la Apolo 17, ocurrió en 1972 y representa la última vez que el hombre se ha posado sobre la superficie lunar. Una ausencia que la NASA anhela acabar cuando la misión Artemis III toque tierra en el satélite terrestre en el 2025.

Previamente, este programa enviará en el 2024 su primera misión tripulada, la Artemis II, que hará el mismo trayecto que a partir del hoy cubra su predecesora. «Va a revolucionar la exploración espacial», dijo a Efe el español y científico de la NASA Carlos García Galán, jefe de la Oficina de Integración del Módulo de Servicio Europeo de la nave Orión, tras destacar que una de las metas del programa «desarrollar la tecnología y conocimientos para operar en el espacio profundo». «La gente va a ver a la primera mujer y el primer hombre de color llegar a la Luna, cosas que nunca hemos hecho, y eso dejara una inspiración de décadas», resaltó.

Durante los 42 días de misión la NASA busca poner a prueba el cohete de 98 metros de altura SLS (siglas en inglés de Sistema de Lanzamiento Espacial), el cual está potenciado con cuatro motores RS-25 y dos propulsores adjuntos, unas características que le ofrecen un 15 % más de potencia que el cohete Saturn usado en las misiones Apolo, como dijo García Galán. De igual forma, se medirán las capacidades de la nave Orión, en la que pueden caber hasta cuatro tripulantes, es decir uno más que la Apolo, y con reservas de agua y oxígeno que le permitirían unos 20 días de viaje independiente.

Dos horas después del lanzamiento, y tras separarse del cohete SLS, la Orión continuará por su cuenta un trayecto que en total cubrirá unos 2,1 millones de kilómetros. La nave volará cerca de la Luna, a casi 100 km de su superficie, y luego entrará en una órbita lunar lejana en la que llegará a situarse a más de 61.000 kilómetros de la Tierra, es decir hasta donde no ha llegado ninguna otra cápsula para tripulación.

A su regreso, sobre el 10 de octubre, a Orión le espera otra dura prueba, como es descender con éxito frente a las costas de San Diego, en California, con apoyo de once paracaídas y en el que deberá aminorar de forma vertiginosa los 40.000 km/h de velocidad con la que alcanzará la atmósfera de la Tierra, un momento en que soportará hasta 2.760 grados centígrados de temperatura.

De acuerdo a medios especializados, relata Efe, la NASA esperará la culminación de esta misión, que ha supuesto una inversión de 4.000 millones de dólares, para dar a conocer a los astronautas que compongan la tripulación de la misión Artemis II.

Las tres primeras misiones de este programa ofrecerán nueva información sobre la Luna, así como los efectos en la fisiología de los humanos que producen los periodos extensos en el espacio, teniendo en cuenta las misiones de largo alcance rumbo al llamado «planeta rojo». «El objetivo final es Marte», aseveró García Galán.