Yolanda Díaz esperará a que el IPC se modere para negociar la subida del salario mínimo

E. Martínez MADRID / COLPISA

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ZIPI ARAGON | EFE

La vicepresidenta anticipa que el paro volverá a subir en agosto y carga contra la patronal: «No está a la altura de su país»

29 ago 2022 . Actualizado a las 13:57 h.

La tensión entre Yolanda Díaz y los empresarios va en aumento. Después de que el vicepresidente de la CEOE, Salvador Navarro, tachara el viernes a la ministra de Trabajo de «arrogante» por su «apoyo explícito» a las manifestaciones sindicales por la subida de los salarios, la vicepresidenta reiteró ayer su posición alegando que Antonio Garamendi, presidente de la patronal, sabe que una inflación por encima del 10 % «es insoportable para las familias».

Más allá, Díaz afirmó que actualmente la patronal «no está a la altura de su país». «Los trabajadores tienen razón», aseguró la ministra de Trabajo en una entrevista en la Ser, en la que recordó que la inflación no está provocada por los salarios porque «no es una crisis de demanda».

En relación al salario mínimo (SMI), reiteró que el Gobierno «lo va a subir» y que la comisión de expertos se reunirá este viernes para hacer una propuesta sobre el incremento. Su intención después pasa por esperar a que se disponga del dato de inflación de noviembre —que la ministra vaticinó sobre el 7 o el 8 %, frente al 10,8 % de julio— para convocar la mesa de diálogo social con sindicatos y patronal en la que se negociará la subida.

Hasta ahora el compromiso del Ejecutivo era llevar el SMI el año que viene hasta al 60 % del salario medio, pero Díaz quiere revalorizarlo «más allá» de esa senda. El SMI se subió por última vez el pasado mes de febrero, tras un acuerdo entre el Gobierno y los sindicatos del que se descolgó la patronal. Se elevó a 1.000 euros, 35 euros más en cada una de las 14 pagas anuales.

La responsable de Trabajo confesó que cree que en esta ocasión tampoco habrá acuerdo con los empresarios, aunque ella asegura que «trabajará por el consenso». «Me gustaría una patronal española que sea próxima a su país y con sensibilidad hacia quienes menos tienen», y aludió a los «márgenes empresariales» que permiten mejorar los salarios.

La vicepresidenta apostó también por una «reforma tributaria en profundidad», argumentando que el 80 % de la recaudación por IRPF proviene de «rentas salariales». «La injusticia fiscal está apoyada en datos. Los que más tienen que aportar no están aportando», señaló.

Díaz reconoció que la situación económica puede ir a peor los próximos meses y avanzó que en agosto el paro volverá a subir, al igual que lo hará, previsiblemente, en septiembre y octubre. Pero señaló que se debe a «la lógica del mercado de trabajo español» y no a que no funcione la reforma laboral.