Una entrevista concedida a la cadena pública RAI ha conllevado una sanción para la emisora por violar la ley que regula la corrección e imparcialidad de los medios cuando hay elecciones
22 sep 2022 . Actualizado a las 16:15 h.El escritor y filósofo francés Bernard-Henri Lévy se ha colado en la recta final de la campaña para las elecciones italianas del próximo domingo, después de que su intervención en un programa de televisión haya provocado una sanción a la cadena pública RAI por violar la ley y haya desencadenado hoy la polémica.
Su entrevista en el programa «El caballo y la torre» que conduce el periodista Marco Damilano, director del semanario L'Espresso hasta hace unos meses, violó la «par conditio», la ley que regula la corrección e imparcialidad de los medios durante la campaña electoral, según la Autoridad italiana para la Garantía de las Comunicaciones (Agcom).
La Comisión de Control del organismo acogió favorablemente el recurso presentado por las formaciones ultraderechistas Hermanos de Italia (FdI), de Giorgia Meloni, y la Liga, de Matteo Salvini, quien había sido calificado por Lévy en el programa del pasado lunes como «patético y ridículo» y refiriéndose a él había dicho: «un fascista que llega al poder no se convierte automáticamente en un demócrata», según los medios locales.
FdI y la Liga integran, junto a Forza Italia, de Silvio Berlusconi, la coalición de derechas que, según todos los sondeos, ganará las elecciones del domingo con un 45 % de los votos, frente al progresista Partido Demócrata y algunos aliados de poco peso que podrían llegar al 27 %.
«Lo sucedido representa una flagrante y múltiple violación de la legislación de la 'par conditio', en desafío a los principios básicos de pluralismo, imparcialidad y equilibrio que deben guiar la función pública», dijo el presidente de la Comisión, Alberto Barachini, que culpó a Damilano, de quien dijo que «contribuyó a la distorsión del debate», y a la cadena de «la ausencia de control editorial».
Lévy «se desahogó con declaraciones sobre el peligro del fascismo en Italia y sobre el hecho de que el voto del sufragio universal no debe respetarse siempre. De algunas de las declaraciones me distancié en antena, con otras no estoy de acuerdo», dijo Damilano en el siguiente programa de «El caballo y la torre».
Tras considerar que en ese episodio no se equilibraron las violaciones cometidas en el anterior, el Agcom ordenó a la RAI que en la apertura del programa de este jueves por la noche comunicara que los principios de pluralismo, objetividad, exhaustividad, corrección e imparcialidad no fueron respetados el día 19 de septiembre.
La decisión de la Autoridad italiana para la Garantía de las Comunicaciones ha generado polémica y los progresistas la consideran «grave e incomprensible en su forma y momento», además de «atentar contra la libertad de expresión», mientras que «aún no ha intervenido en casos flagrantes de información parcial, incorrecta y no veraz en algunos programas de noticias de emisoras privadas contra» el PD y a su líder, Enrico Letta.