Miles de seguidores de Bolsonaro exigen una intervención militar para evitar que Lula gobierne

Héctor Estepa RÍO DE JANEIRO / E. LA VOZ

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Miles de bolsonaroristas, hoy, ante un cuartel militar de Río de Janeiro.
Miles de bolsonaroristas, hoy, ante un cuartel militar de Río de Janeiro. Antonio Lacerda | Efe

Continúan los bloqueos de carreteras en una veintena de Estados

03 nov 2022 . Actualizado a las 10:57 h.

Los seguidores más acérrimos de Jair Bolsonaro continúan sin aceptar la derrota del presidente en las urnas. Miles de ellos se concentraron ayer frente a cuarteles militares de Río de Janeiro, São Paulo y Brasilia, pidiendo abiertamente una intervención de las fuerzas armadas para evitar el futuro gobierno del izquierdista Lula da Silva, que ganó los comicios el pasado domingo con 1,8 puntos de ventaja sobre el líder ultraderechista.

«Yo autorizo: intervención militar ya», gritaban ayer quienes se concentraban frente a la sede del Ejército en Río de Janeiro, ataviados, la mayoría, con la camiseta de la selección brasileña de fútbol y la bandera nacional.

Las marchas se produjeron mientras continúa el silencio del líder ultraderechista, que el martes admitió tácitamente su derrota en un breve discurso, sin concederla de forma directa o felicitar a su rival en las urnas, mentando «injusticias» en el proceso electoral. La Policía Federal investigaba ayer quién estaba planeando y convocando las manifestaciones a favor de Bolsonaro.

Siguen también los bloqueos de carreteras que camioneros y conductores particulares defensores de Bolsonaro realizan en al menos 20 Estados del país, y que ya provocan desabastecimiento en algunos lugares de Brasil, con asociaciones de productores denunciando que se están perdiendo 500.000 litros de leche al día debido a las barricadas.

Minutos antes del cierre de esta edición se acababa de producir un atropello masivo en una de esas concentraciones en el municipio de Mirassol (São Paulo). Un conductor particular avanzó a gran velocidad, hiriendo al menos a siete manifestantes, dos de ellos de gravedad.

El número de personas protestando en las autopistas se redujo después de que Bolsonaro dijese el martes que no se podían utilizar los «métodos» de movilización «de la izquierda» que «siempre perjudicaron a la población».La Policía Militar intentó liberar algunos de los bloqueos, como en São Paulo, donde los manifestantes volvían a la carga cuando los agentes cesaban de lanzar gases lacrimógenos

Lula, por su parte, no se refirió a las manifestaciones en la jornada de ayer, en la que siguió, según sus compañeros de campaña, montando su equipo de cara a la transición de poder.