La recaudación del impuesto a las energéticas quedará reducida a la mitad
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El Gobierno ingresará 2.000 millones de euros en dos años, en lugar de los 4.000 estimados inicialmente.
19 nov 2022 . Actualizado a las 10:28 h.La recaudación del impuesto que el Gobierno planea aplicar a partir de enero a las compañías energéticas (eléctricas, gasistas y petroleras) será la mitad de la prevista, después de que el Gobierno aceptase suavizar su aplicación. Así, ingresará 2.000 millones de euros en dos años, en lugar de los 4.000 estimados inicialmente. El Ejecutivo aceptó en el Congreso dos enmiendas del PNV y el PDECat para que se excluya del importe neto de la cifra de negocio el correspondiente a las actividades reguladas y también las actividades de las compañías en el exterior.
Analistas de Bankinter citados por Europa Press consideran que con las nuevas modificaciones el sector eléctrico (en el que hay más actividades reguladas) se verá más beneficiado que el petrolero y gasista. Así, estiman que la compañía que saldrá más beneficiada con los cambios en la propuesta normativa sería Endesa, para la que el impacto inicial de cerca de 800 millones en los dos ejercicios por el impuesto podría verse reducido a algo menos de la mitad.
En el caso de Iberdrola, Bankinter señala que la reducción podría ser similar, aunque su impacto en la capitalización bursátil sería menor.
En línea con Bruselas
Por su parte, los analistas de Banco Sabadell subrayan el efecto positivo de la noticia, «no tanto por el impacto cuantitativo (rebaja el impacto por debajo del 1 % en capitalización) sino por la decisión del Gobierno de suavizar finalmente el impuesto al sector y alinearse con las directrices marcadas por Bruselas y demandadas por las compañías eléctricas».
Tal como estaba diseñado inicialmente, el impuesto temporal y extraordinario que pretendía sacar adelante el Gobierno gravaba con un 1,2 % las ventas de las energéticas con unos ingresos superiores a los 1.000 millones anuales, independientemente de dónde procedieran. El impuesto estará en vigor durante los 2023 y 2024, pero se aplicará a las cuentas de las empresas de los años 2022 y 2023.
Está previsto que la resolución final sobre la proposición de ley del impuesto llegue en el pleno del Congreso del próximo jueves, para que el gravamen entre en vigor el 1 de enero.