Cándido Conde-Pumpido y María Luisa Balaguer se disputarán este miércoles la presidencia del Constitucional

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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El voto de la magistrada María Luisa Segoviano, en la imagen jurando el cargo, será decisivo para determinar la presidencia del Tribunal Constitucional.
El voto de la magistrada María Luisa Segoviano, en la imagen jurando el cargo, será decisivo para determinar la presidencia del Tribunal Constitucional. BALLESTEROS | EFE

Los magistrados del sector progresista no llegan a un acuerdo para que uno de los dos se retire, por lo que el voto de María Luisa Segoviano será decisivo

11 ene 2023 . Actualizado a las 08:06 h.

Los magistrados del Tribunal Constitucional Cándido Conde-Pumpido y María Luisa Balaguer, ambos del sector progresista, se disputarán este miércoles la presidencia del tribunal de garantías en una votación en la que participarán los once miembros actuales. Los siete magistrados del sector progresista se reunieron con la intención de llegar a un acuerdo para presentar una candidatura única con la retirada de uno de los dos aspirantes. Pero ese pacto no fue posible, ya que ni Conde-Pumpido, que tiene el apoyo mayoritario de este bloque, ni Balaguer, aceptaron renunciar a la presidencia.

En este momento, y después de la incorporación de los dos magistrados nombrados por el Gobierno y los otros dos designados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el Constitucional hay una mayoría progresista de siete a cuatro. Sin embargo, Balaguer cuenta con el apoyo de los cuatro magistrados conservadores, que no respaldan la candidatura de Conde-Pumpido por considerarlo demasiado próximo al PSOE por haber sido fiscal general del Estado con el Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero. Con los cuatro votos conservadores, sumados al suyo propio, Balaguer dejaría el marcador en seis a cinco a favor de los progresistas. 

Una votación incierta

Sin embargo, la clave del resultado final está en el sentido del voto de la nueva magistrada María Luisa Segoviano, que a pesar de ser progresista fue aupada al Constitucional a propuesta de los vocales conservadores del CGPJ. Segoviano no ha manifestado hasta ahora en público su preferencia por ninguno de los dos aspirantes. En caso de optar por Balaguer, con la que comparte la trayectoria en favor del feminismo, Segoviano inclinaría la balanza con un marcador de seis a cinco a favor de la rival de Conde-Pumpido, que se convertiría así en la nueva presidenta.

La sesión convocada para este miércoles a las 13:00 horas se presenta por tanto abierta, a la espera de conocer el decisivo voto de Segoviano. Al margen de apoyar a Balaguer, el bloque conservador presenta como candidato a la vicepresidencia del Constitucional al magistrado Ricardo Enríquez, el de mas edad de este sector, cumpliendo así la tradición de que la vicepresidencia la ostente el más veterano del bloque opuesto al de la presidencia.

La marcha del juez César Tolosa deja a la Sala Tercera del Supremo con solo 22 de sus 33 miembros

El magistrado del Tribunal Supremo Pablo Lucas, encargado de controlar la legalidad de las actividades del CNI, se ha convertido en presidente interino de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo tras la partida de su hasta ahora responsable, César Tolosa, al Tribunal Constitucional, lo que agrava la crisis en esta sala por la falta de personal.

El juez del CNI asumirá las riendas de la Sala Tercera en un momento crítico para la misma porque, si bien la ley marca que debe contar con 33 magistrados, con la salida de Tolosa se queda en 22. La razón es que el Consejo General del Poder Judicial no ha podido cubrir las vacantes que han ido surgiendo desde marzo del 2021 debido a la reforma legal operada en esa fecha, que impide a un consejo en funciones, como el actual —que lleva cuatro años caducado—, hacer nombramientos discrecionales en la cúpula judicial.