Cientos de personas protestan en Cuba y el régimen los tilda de «tres borrachos»

Amanda pérez LA HABANA / E. LA VOZ

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Una mujer ondea una bandera de Cuba durante un protesta contra el Gobierno, en julio del 2021
Una mujer ondea una bandera de Cuba durante un protesta contra el Gobierno, en julio del 2021 Ana Fernán | EUROPA PRESS

Al menos cinco personas continuaban este lunes detenidas

09 may 2023 . Actualizado a las 09:11 h.

El pueblo de Caimanera, en la provincia cubana de Guantánamo, se calentó este sábado cuando cientos de personas salieron a las calles a protestar pacíficamente por la situación de precariedad en la que viven, coreando «libertad», «democracia», «queremos comida», «abajo la dictadura» y «patria y vida».

Los manifestantes fueron hasta la sede del Partido Comunista (PCC) y del gobierno municipal, tras lo cual fueron violentamente reprimidos por fuerzas de élite del Ejército y la Policía. Pese al casi inmediato corte de internet, que se prolongó varias horas en todo el país, han salido después a la luz vídeos en los que se puede ver inequívocamente lo ocurrido, así como varios testimonios de la gente del pueblo.

Hasta donde se ha podido conocer, cinco personas seguían detenidas este lunes. Victoria Martínez Valdivia, madre de dos de ellos, ha denunciado que su hijo mayor se encuentra en paradero desconocido hasta el momento, tras ser golpeado brutalmente.

«A Luis Miguel Alarcón Martínez le metieron una patada en la cabeza. No sé si mi hijo está vivo o muerto. Su hermano [con discapacidad intelectual] salió a ayudarlo y le dieron golpe por donde quiera», relata la madre, desesperada, en un vídeo. «A mí me dieron, a mi hija le entraron a galletas [cachetadas] también», añade.

Ella y otros vecinos subrayan que los manifestantes no actuaron con violencia, y explica el detonante de la protesta. «Salieron porque vieron lo que sus sobrinos estaban comiendo: chícharos [guisantes] con gorgojos, arroz y un plátano hervido, todo cocinado sin aceite ¿Qué somos? ¿Machos [cerdos]?», se pregunta esta mujer humilde. «Salieron porque no aguantaron más, oyendo a esas criaturitas decir que tenían hambre», concluye con los niños a su lado.

Horas después del suceso, apareció en una realidad paralela un miembro del PCC local pretendiendo dar una imagen de tranquilidad y asegurando que solo se trataba de «tres borrachos» que alteraron el orden y «tuvieron respuesta de las autoridades y la población». Ignorando que existen los vídeos e internet, al día siguiente se publicó un comunicado firmado por la presidenta del Gobierno en Caimanera, que reiteraba esta versión: «Varias personas en estado de embriaguez (…) pretendieron perturbar la tranquilidad ciudadana».

No es la primera vez que sucede algo así. El mayor estallido social, el 11 de julio del 2021, se saldó con un muerto y más de mil detenidos y condenados a largos años de prisión, con la subsiguiente manipulación mediática oficialista. Posteriormente han ocurrido hechos similares de forma puntual en otras localidades.

Todo hace pensar que no será diferente con los sucesos en Caimanera. Pero en las condiciones actuales de profunda crisis sistémica en que se encuentra Cuba, es predecible también que se multipliquen estos estallidos y cada vez vayan a más.