El asesino de Orio usó una escopeta recortada heredada de su padre para matar a su expareja

El asesino de Orio usó una escopeta recortada heredada de su padre para matar a su expareja. Así lo ha asegurado el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, en la rueda de prensa convocada para facilitar más detalles del crimen machista que ha sobrecogido a la localidad guipuzcoana.

La recortada fue hallada en el lugar del crimen. En un principio, se dijo que Alberto Casado, residente en Zarauz, utilizó una bomba casera para matar a María Lourdes del Hoyo, de 50 años y madre de dos hijos. «La mujer no constaba en los registros de violencia de género. Es la primera víctima mortal de violencia de género en Euskadi», ha señalado Erkoreka en su comparecencia.

El hombre disparó a bocajarro a su expareja con la que había quedado previamente en el parque. El consejero de Seguridad explicó que los testigos, al ver una caja blanca y escuchar una gran estruendo, provocó que pensaran en un primer momento que se había tratado de un artefacto explosivo.

Además de la escopeta, la licencia de arma del asesino también era una herencia de su padre. En ese sentido, Josu Erkoreka dijo desconocer si el progenitor era cazador. Después de disparar a la mujer, Casado utilizó la recortada para quitarse la vida. «La Ertzaintza está reuniendo pruebas y evidencias que ayudarán a esclarecer lo ocurrido», aseguró el consejero. «Quiero dirigir un mensaje de cercanía y solidaridad a los hijos de la víctima. Vamos a respetar su intimidad», añadió.

En el parque rodeados de niños

El crimen tuvo lugar este martes por tarde en el parque infantil de Arrantzale kalea, en Orio, que en ese momento estaba lleno de niños. Cerca, en un banco, una mujer leía plácidamente un libro. Un hombre se le acercó con una bolsa en la mano y se colocó delante de ella. Lo que parecía una estampa cordial cambió de repente. «Oímos un estruendo y echamos a correr», explicaba unos minutos después una vecina que en ese momento estaba con su hijo en el parque. Corrieron para ponerse a salvo de no se sabía muy bien qué y en su huida pasaron junto a dos cadáveres, los de Lourdes y Alberto, el hombre que presuntamente la mató.

La investigación apunta a que Alberto se acercó a su víctima y, sin mediar palabra alguna, la mató. Lo hizo con una escopeta recortada con la que disparó a Lourdes a bocajarro en la cabeza. Algunos testigos sostienen que guardaba el arma en una caja. Otros dicen que la llevaba oculta en una bolsa de plástico. Inmediatamente después, dirigió el cañón contra su propia cabeza y volvió a apretar el gatillo.

La mujer no tuvo tiempo de reaccionar. Su cuerpo quedó inerte sobre el banco, aún sentada. El de Alberto yacía sobre el suelo. Ambos tenían las cabezas destrozadas por los disparos. Junto a ellos quedaron un teléfono móvil, una escopeta y el libro que Lourdes estaba leyendo. 

Vecinos del pueblo

Según parece, el fallecido, Alberto, era «una persona conocida» en la localidad. De unos 50 años, fue durante mucho tiempo entrenador y a la vez jugador de un equipo de fútbol sala, y quienes le conocían lo consideraban «una persona responsable y tranquila». Él vivía con su madre, en un primer piso a pocos metros del lugar suceso.

Por su parte, la fallecida, Lourdes, trabajaba en un empresa de transportes especializados en pescado y marisco, ubicada en el límite entre las localidades de Orio y Aia. Las personas que la conocían aseguran que era «una mujer muy maja, alegre y sonriente. Allí donde te veía, te saludaba».

Urkullu: «Mostramos nuestra solidaridad con las familias»

El lendakari del País Vasco, Iñigo Urkullu, guardó un minuto de silencio antes de dar inicio a un mitin en Basauri. Antes, el jefe del Gobierno vasco lamentó los hechos ocurridos:  «Llegamos a este mitin con pena, con tristeza ante lo que es un tráfico suceso que se ha dado esta tarde en el municipio de Orio con dos personas fallecidas como consecuencia de una explosión supuestamente por causa de violencia machista. Mostramos nuestra solidaridad con las familias y allegados de los fallecidos».

El Ayuntamiento de Orio, gobernado por EH Bildu, ha convocado este miércoles una reunión de urgencia de los grupos municipales para tratar el caso. 

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