Las empresas españolas pierden 26.000 millones al año persiguiendo a clientes morosos

Redacción LA VOZ

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ALBERTO LÓPEZ

Seis de cada diez compañías gallegas dedican más de 10 horas a la semana a recuperar el dinero

24 may 2023 . Actualizado a las 09:21 h.

El Torero del Moroso o el El Cobrador del Frac, tan populares en los años 90, han dado pasado con el tiempo a empresas especializadas en recuperar impagos.

Es un negocio jugoso si se tiene en cuenta que seis de cada diez empresas españolas son víctimas de la morosidad y hasta el 12 % corren el riesgo de bajar la persiana por este fenómeno, según Crédito y Caución. 

Intentar recuperar ese dinero no es una tarea sencilla. Las compañías en España pierden cada año 26.000 millones de euros persiguiendo a clientes deudores. Una factura que asciende a 275.000 millones en el conjunto del Viejo Continente, según el último Informe Europeo de Pagos de Intrum. Su director de gestión en España, José Luis Bellosta, señala que «hacer seguimiento de los cobros de manera efectiva es una tarea que, en muchas ocasiones, conlleva un gasto excesivo para las empresas, tanto de tiempo como de recursos». 

En el documento se recoge que seis de cada diez compañías gallegas dedica más de 10 horas a la semana a perseguir los pagos de sus clientes, más que la media nacional. 

Los negocios españoles que logran recuperar deudas lo hacen con 81 días de retraso, una semana más que la media europea. De hecho, son los quintos que más tardan en cobrar, solo por detrás de sus vecinos de Finlandia (83 días), Polonia (82 días), Italia (81 días) y Alemania (81 días). Esa tardanza cercena las expectativas de crecimiento de muchas empresas, que prefieren aplazar inversiones ante la incertidumbre de no saber cuándo van a disponer de ese capital. 

Aunque casi siete de cada diez creen que aumentarán los riesgos de impago el año que viene, la morosidad no es el único factor que está pesando sobre el estado de salud de las compañías españolas. 

Tres de cada diez reducirán costes

La inflación sigue siendo el gran desafío para mantener los márgenes de rentabilidad. Seis de cada diez compañías creen que los altos precios no darán tregua hasta dentro de un año o más, por lo que en los próximos meses optarán por reducir costes (31%) o asegurar los pagos de los clientes con mayor rapidez (24%), frente a otras medidas como ampliar su inversión en innovación y desarrollo de nuevos productos para ser más competitivos (9%). 

Más de la mitad reconocen que la presión que están ejerciendo los precios se traduce en clientes que piden aplazar pagos o solicitan descuentos. Además, nueve de cada diez empresas han recibido o prevén recibir solicitudes de aumentos salariales, aumentando más los costes.