La intérprete debutó en 1947, vivió la llegada del destape y se convirtió con los años en uno de los personajes más queridos por el público de la televisión
27 jun 2023 . Actualizado a las 22:46 h.La eterna sonrisa de Carmen Sevilla, su encanto natural y sencillez se apagó este martes a los 92 años a consecuencia de una larga enfermedad. Apartada de la vida pública desde hace más de una década, en 2012 le diagnosticaron la enfermedad de Alzheimer. Su deterioro físico obligó a su hijo Augusto Algueró, que vivía con ella en Madrid, a ingresarla en un geriátrico, donde ha vivido los últimos años. Desde allí fue trasladada el pasado domingo a un hospital madrileño tras empeorar su estado de salud.
Carmen García Galisteo nació en el sevillano barrio de Heliópolis el 16 de octubre de 1930. Hija de Antonio García Padilla 'Kola' y Florentina Galisteo Ramírez fue la mayor de tres hermanos. Desde pequeña se sintió llamada por las tablas, por lo que pronto se inició en el cante y el baile. Con doce años se subió por primera vez a un escenario con la compañía de Estrellita Castro, con el espectáculo 'Rapsodia española', protagonizado por Paquita Rico. Pasó después a formar parte de las compañías del Príncipe Gitano y de Paco Reyes.
«La novia de España»
La belleza de la Sevilla, apodada la novia de España, no pasó desapercibida para los productores cinematográficos. De esta manera, en 1947 debutó en la gran pantalla con Serenata española, dirigida por Juan de Orduña. Desde ese momento su carrera fue imparable, protagonizando títulos que ya son historia del cine español y que fueron éxito en la taquilla como La hermana San Sulpicio, Violetas imperiales, La Pícara molinera o La fierecilla domada.
En 1957 protagonizó la película La venganza de Juan Antonio Bardem, primer filme español Premio de la Crítica Internacional del Festival de Cannes. De esos años es Rey de Reyes, macroproducción dirigida por Nicholas Ray, que fue rodada en España, en la que interpreta a María Magdalena.
Para entonces Carmen Sevilla era una de las artistas habituales en los musicales de la nueva TVE, cuyas apariciones las compaginaba con el cine y el teatro. El 23 de febrero de 1961 contrajo matrimonio con el compositor Augusto Algueró. Del matrimonio nació su único hijo, Augusto.
El final del franquismo y el pseudo-erotismo previo a la llegada del destape llevan a Carmen Sevilla a participar en títulos como Enseñar a un sinvergüenza, Un adulterio decente, La cera virgen o No es bueno que el hombre esté solo, en los que la actriz lució su escultural figura. En 1972 protagonizó Marco Antonio y Cleopatra, junto a Charlton Heston, y seis años más tarde rodó su última película, Rostros.
De las «ovejitas» al Telecupón
La muerte de Algueró y su posterior boda el 5 de septiembre de 1985 con el productor cinematográfico Vicente Patuel hacen que la artista se aparte de los escenarios, para trasladar su residencia a la finca de la pareja, en Herrera del Duque (Badajoz). Allí es donde Sevilla criaría sus célebres «ovejitas».
Con la llegada de las televisiones privadas, Carmen Sevilla vuelve de nuevo a la palestra. Fue el realizador Valerio Lazarov, director entonces de Telecinco, el que en 1991 la llamó para presentar el Telecupón. Durante seis años protagonizó un espacio, donde la audiencia seguía cada noche sus célebres despistes y meteduras de pata que la artista salvaba con toda la naturalidad y el salero que la caracterizó a lo largo de su vida. En la cadena de Fuencarral también presentó galas y programas de variedades como Se acabó la siesta, Date un respiro, Mañana serán estrellas con Manolo Escobar, ¿Se puede? y En directo contigo. Antena 3 la fichó en 1999 para protagonizar la serie Ada Madrina, proyecto que no funcionó. Posteriormente presentó el programa La noche de Carmen.
En 2000, la actriz quedó de nuevo viuda y tuvo que vender su finca, por lo que regresó a Madrid. Tres años después llegaría el que fue su último gran éxito de audiencia. TVE la llama para reemplazar a José Manuel Parada al frente de Cine de barrio. La actriz cumplió con el cometido todos los sábados por la tarde, hasta el 14 de diciembre de 2010, día que grabó su último programa. Fue sustituida por Concha Velasco.
El público preguntaba por Carmen Sevilla, a la que se solía ver paseando por el madrileño paseo de Rosales. La última aparición en público la hizo con motivo de su 81 cumpleaños, en 2011. Sin embargo, no tardarían en llegar las malas noticias. En abril de 2012 era diagnosticada de mal de Alzheimer, dolencia degenerativa que ya había sufrido su madre. Hace unos meses se supo que la actriz, una de las más bellas de la escena española, casi no podía hablar y ya no reconocía sus seres queridos, por lo que fue internada en una residencia de ancianos. Los enfermeras y cuidadores que la atendían a domicilio poco podían hacer ya nada ante su deteriorado estado físico.
Durante su carrera profesional fueron muchos los reconocimientos que recibió. Entre ellos destacan el Premio del Círculo de Escritores Cinematográficos (1955), Premio del Sindicato Nacional del Espectáculo (1956), Premio del Círculo de Escritores Cinematográficos (1970), o el premio TP de Oro (1993) a su trayectoria profesional.