La escuela laica francesa declara la guerra a la abaya

Asunción Serena PARÍS / E. LA VOZ

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Mujer con la abaya árabe, en una calle de Nantes.
Mujer con la abaya árabe, en una calle de Nantes. STEPHANE MAHE | REUTERS

Desde la ley del 15 de marzo del 2004, está prohibido en los colegios galos el uso de «todo signo religioso ostentoso»

09 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El nuevo curso escolar ha arrancado en Francia con una polémica en nombre del «principio de laicidad». Los directores de colegios e institutos franceses tienen orden de prohibir que las estudiantes utilicen en el interior de sus establecimientos la abaya, una túnica larga que cubre el cuerpo y brazos de la mujeres musulmanas. El presidente Emmanuel Macron defendió el lunes la prohibición de la abaya: «La escuela es laica. No hay cabida para los signos religiosos». Para el nuevo ministro de Educación, Gabriel Attal, el uso de esta vestimenta por parte de las escolares francesas son «tentativas de desestabilización»

Desde la ley del 15 de marzo del 2004, está prohibido en los colegios galos el uso de «todo signo religioso ostentoso». Aunque la ley no hace una lista exhaustiva de esos signos, el Consejo de Estado ha precisado posteriormente que serían todos aquellos que conducen a que «se reconozca inmediatamente la pertenencia religiosa» o que, aunque en sí no sean signos religiosos, acaban siéndolo «indirecta y manifiestamente» por la voluntad del alumno de darle ese significado. Y ahí estaría incluido el uso de la abaya.

Más de 4.000 denuncias

La prohibición de la abaya es la respuesta a una nota del Ministerio de Educación denunciando que el número de ataques a la laicidad en el ámbito escolar se ha disparado en el 2023, especialmente a través del uso de estas vestimentas. Se han registrado 4.710 denuncias que afectan a 150 establecimientos. Casi la mitad de los casos están ligado al uso de la abaya y representan un aumento del 120 % respecto al curso precedente. Aunque habría que relativizar estas cifras en comparación con los más de 6 millones de alumnos de secundaria en Francia.

Pero se trata de un fenómeno que no cesa de aumentar desde el asesinato de Samuel Paty en octubre del 2020. Este profesor fue degollado a la puerta de su colegio días después de mostrar unas caricaturas de Mahoma en su clase, y tras una campaña de acoso lanzada por el padre de una de sus alumnas.

Además, no se trata simplemente de ataques contra la laicidad por parte de los alumnos. La nota del ministerio denuncia también el aumento de «presiones familiares y comunitarias» reforzadas por el apoyo de organismos como el Colectivo contra la Islamofobia en Europa.

Según Gabriel Attal, el inicio de este curso ha transcurrido con tranquilidad. Se han registrado 298 casos de jóvenes que se presentaron con la abaya y solo 67 se negaron a quitársela. Entre ellas una joven del instituto Ambroise-Brugière de Clermont-Ferrand cuyo padre ha sido detenido tras proferir por teléfono amenazas de muerte contra el director del establecimiento.

La batalla por el uso de la abaya no ha terminado a pesar de que el Consejo de Estado ha rechazado la demanda de la asociación Acción Derechos de Musulmanes que pedía medidas cautelares contra su prohibición. Varias organizaciones de extrema izquierda han presentado otros recursos porque consideran que el Ministerio de Educación no tiene competencias para decidir qué objeto es religioso o no.