Condenado a prisión por estafar casi 300.000 euros a una mujer a la que engañó para abrir una cuenta en el «banco del cielo»

Cristina Porteiro
C. Porteiro REDACCIÓN / LA VOZ

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MARTINA MISER

El hombre aprovechó su estado mental alterado para persuadirla, asegurando que allí le rentaría más

06 oct 2023 . Actualizado a las 19:13 h.

La Audiencia Provincial de León ha condenado a siete años de cárcel a un hombre que estafó casi 300.000 euros a una mujer de 72 años, en el momento en el que comenzó el engaño, a la que convenció para abrir una «cuenta en el cielo»

Según la sentencia, fechada el 5 de septiembre del 2023, Basilio (nombre ficticio) aprovechó el estado mental de su vecina Piedad (nombre ficticio), quien experimentaba ideas místico-religiosas y megalomaníacas que le hacían creer que era santa, para sustraerle 286.692 euros entre el año 2013 y el 2019. 

El juez da por probado que el hombre, quien regentaba una tienda de naturopatía que acabó quebrando, maquinó un plan para convencer a Piedad de la utilidad de ingresar su pensión y sus ahorros en una cuenta en el cielo, «donde le rentaría más» porque los intereses son más altos que los terrenales. También le hizo creer que ese dinero le serviría para construir allí una casa junto a su madre y su esposo, ambos fallecidos. 

Para persuadir a la mujer, que vivía sola, Basilio (cuenta con antecedentes penales por atentado) no dudó en realizar llamadas telefónicas a Piedad haciéndose pasar por «Nuestro Señor Jesucristo» o la «Virgen María». En esas conversaciones, le pedía que retirara dinero de tres cuentas bancarias que tenía la estafada en Unicaja, Banco Santander y Abanca, y llevara esas cantidades hasta la tienda del condenado, quien también simuló «apariciones» celestiales para presionarla y llegó a amenazar con matar a sus hijos si les contaba algo. 

«Piedad contrató varios préstamos bancarios con el único fin de entregar su importe al acusado», explica la sentencia en los hechos probados. El engaño fue tal, que la mujer, quien tiene en la actualidad 82 años y acabó en deuda con los bancos, llegó a domiciliar su pensión de viudedad de 713,21 euros en una de las cuentas de las que sustraía el dinero regularmente para entregárselo a Basilio, quien «siguió simulando ser un ser celestial». 

El condenado esquilmó de tal forma a la anciana que esta en el 2019 ya no tenía dinero para comprar pan. Fueron sus hijos quienes ese año destaparon la estafa. Piedad solía dar a sus nietos 50 euros en Navidad, pero dejó de hacerlo porque ya no tenía fondos. Una de sus hijas explicó que la veían llorar continuamente y, después de «atosigarla», acabó confesando que no tenía dinero para pagar una avería de casa ni para comer. 

Tras conocer los hechos, uno de sus hijos interpuso la denuncia y mandaron a la anciana hasta la tienda de Basilio con una grabadora para recabar pruebas. El hombre volvió a «simular voces» para continuar con el engaño. 

El juez encuentra a Basilio culpable de estafa continuada, aprovechando la situación de vulnerabilidad de la mujer, quien sufrió una «ruptura con la realidad» en el 2013. Le impone la pena de prisión de siete años y le obliga a indemnizar a la víctima con 286.792 euros