Puigdemont liderará la negociación con el PSOE en el extranjero con cuatro verificadores
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La mesa entre los socialistas y Junts se reunirá mensualmente fuera de España. El primer encuentro será a finales de noviembre
11 nov 2023 . Actualizado a las 13:21 h.Desconfianza mutua y dos posiciones muy distintas. Este es el punto del que parten socialistas y exconvergentes, que se reunirán mensualmente en una mesa de negociación en el extranjero —para que pueda acudir el expresidente de Cataluña Carles Puigdemont, huido de España en el 2017— y que contará con la participación de cuatro verificadores internacionales que constatarán si se cumplen o no los avances y acuerdos entre ambos partidos. Así lo aseguró este viernes Laura Borràs, presidenta de Junts, en declaraciones a Catalunya Ràdio, donde anunció que en el primer encuentro con el PSOE, que será a finales de noviembre, propondrán un referendo de autodeterminación amparado en el artículo 92 de la carta magna que establece que debe ser autorizado por el Congreso de los Diputados.
«La desconfianza es máxima y el escepticismo, absoluto. Sabemos a quién tenemos delante», reconoció Borràs para justificar la necesidad de un mecanismo de verificación internacional con cuatro miembros, que serán «especialistas de primer nivel, con prestigio y solvencia contrastada», dijo, aunque no desveló sus nombres. Satisfecha por pasar del «diálogo vacío a la negociación plena», advirtió que Junts no ha dado sus votos a cambio de nada y que «Sánchez durará lo que dure su palabra», de modo que la estabilidad del futuro Gobierno progresista dependerá del cumplimiento del pacto de legislatura presentado este jueves. Borrás insistió en que su formación no ha renunciado a nada y que su objetivo sigue siendo el mismo: conseguir la independencia de Cataluña. «El giro copernicano lo ha dado el PSOE (...) Ha renunciado a planteamientos de que la amnistía era inconstitucional e impensable, y ahora es viable», sostuvo.
También el secretario general de Junts, Jordi Turull, admitió, en una entrevista a la emisora Rac 1, que no se fían de los socialistas y que los verificadores internacionales serán «un combinado» de organismos y personas «muy potentes», uno de las cuales hará de portavoz. Las mesas de negociación se celebrarán en Bruselas «o en otra ciudad europea», indicó, y sobre ellas se pondrán asuntos como los límites del autogobierno catalán o el referendo de autodeterminación, que no será una condición sine qua non para aprobar los Presupuestos Generales del Estado del 2024, aseguró. Turull avisó que la duración de la legislatura dependerá de los avances: «No hemos ido con la lista de la compra (...) Esto no va de un Majestic 2, sino de un acuerdo para encontrar la solución al conflicto político», aclaró, en alusión al pacto entre el PP y la antigua CiU para investir a Aznar en 1996.
«Las dos formaciones no se fían entre sí», coincidió el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que restó importancia, en declaraciones a la Ser, a la figura del verificador: «Muchas veces los partidos recurren a expertos internacionales y no pasa nada (...) Servirá para plantear soluciones, desencallar temas». El socialista celebró que, por primera vez, se van a sentar a la misma mesa y que los beneficiarios serán «los ciudadanos de Cataluña y España» porque se va a superar una tensión que era «insoportable», valoró.