Más de 450 policías franceses, tras el comando que mató a dos funcionarios de prisiones para liberar a un reo
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La policía científica analiza el vehículo de los atacantes y revisa las cámaras de vigilancia
11 jun 2025 . Actualizado a las 10:38 h.Más de 450 agentes de la policía francesa, ayudados por Interpol, siguen activamente movilizados en búsqueda del comando que el martes mató a sangre fría a dos funcionarios de prisiones e hirió a otros tres para liberar a un prisionero, Mohamed Amra, conocido con el apodo de La Mosca, que era trasladado a la prisión de Evreux después de declarar ante el juez.
Este affaire ha sorprendido por la violencia de los agresores y por el perfil del liberado, que no era considerado hasta ahora entre los hombres más peligrosos de Francia, como indicó el ministro del Interior, Gérard Darmanin. Sin embargo, su foto figura ya en los ficheros de Interpol, que ha difundido una notificación roja para señalar que se encuentra entre las personas más buscadas y que puede presentar una amenaza para la seguridad pública.
El ataque se produjo el martes poco después de las once de la mañana, cuando el furgón en el que era trasladado Mohamed Amra y el coche de seguimiento acababan de pasar el peaje de Incarville. En ese momento, un coche negro que esperaba en la explanada se dirigió hacia el furgón de prisiones y chocó contra él. Dos hombres vestidos de negro, con el rostro cubierto, chalecos antibalas y armas de guerra salieron del vehículo se dirigieron hacia el furgón, abrieron las puertas, mataron a sangre fría a los funcionarios y extrajeron al prisionero que viajaba en la parte posterior del vehículo. Otros miembros del comando que habían seguido el convoy dispararon contra el resto de agentes. Los tres resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, aunque el miércoles parecían haber superado la fase más crítica.
Progreso en la investigación
Frente a los agresores, los funcionarios de prisiones no disponían de más de un pistola de mano, una SIG Sauer, que tuvieron tiempo de desenfundar y utilizar, pero resultó irrisoria frente a las armas de guerra que utilizaron los asaltantes. Según algunos testigos, se oyeron 30 tiros.
El comando intentó sin éxito quemar el coche que provocó el accidente, pero sí logró prender fuego a los dos vehículos que utilizaron para escapar y que fueron recuperados por la policía a una quincena de kilómetros del peaje.
La policía científica ha analizado los tres vehículos en búsqueda de huellas digitales o genéticas. Y también se ha procedido a revisar las cámaras de vigilancia y los vídeos de los testigos del ataque. «La investigación progresa», aseguró el miércoles el primer ministro, Gabriel Attal, pero sin querer entrar en detalles.
El evadido, Mohamed Amra, tiene 30 años, nació en Rouen y ha sido condenado en 13 ocasiones pero nunca «por infracción relacionada con la ley sobre estupefacientes», según precisó en rueda de prensa la fiscal de París Laure Beccuau.