Beiras, la conexión gallega de Paz Pereira, el aspirante a gobernar Bolivia

H. ESTEPA / F. Espiñeira LA PAZ / E. LA VOZ

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Rodrigo Paz, durante la campaña electoral a las presidenciales de Bolivia.
Rodrigo Paz, durante la campaña electoral a las presidenciales de Bolivia. Claudia Morales | REUTERS

La pareja del exlíder del BNG era tía materna del candidato nacido en Santiago de Compostela

19 oct 2025 . Actualizado a las 20:57 h.

A Rodrigo Paz Pereira no es fácil sacarle confesiones de carácter personal. En una Bolivia en la que el aspecto indigenista tiene un marcado componente político y es decisivo a la hora de configurar mayorías, el hecho de tener una procedencia europea es, a veces, más un obstáculo que una ventaja.

Paz Pereira nació en Santiago de Compostela en 1967 y las encuestas lo colocan lejos de su sueño de presidir Bolivia, con hasta siete puntos de diferencia. Pero de su paso por Galicia aprendió a convivir con el «malo será». Nadie contaba con él en la primera vuelta. Y dio la campanada. Con casi el 25 % de los votos se coló en la segunda ronda contra el derechista Tuto Quiroga.

Rodrigo Paz ha seguido peleando con su caravana electoral lejos de los grandes núcleos, buscando el contacto personal con los electores. Dicen quienes le conocen que conserva una prudencia poco habitual para quien procede de una familia acostumbrada a mandar desde su abuelo, el general Néstor Paz.

Su padre, Jaime Paz Zamora ya fue presidente del país (1989-1993). Y antes vicepresidente. Pero en sus años jóvenes, para huir de la dictadura militar contra la que intentaba luchar, tuvo que refugiarse en Europa. En la década de los sesenta sufrió un grave accidente de coche y acabó en un hospital de Bruselas en el que conoció a la que sería su pareja para el resto de su vida, una joven enfermera llamada Carmen Pereira Carballo, que trabajaba en la capital belga. 

Amor en la rehabilitación

De la rehabilitación surgió el amor y una larga relación que desembocó en la formación de una familia. En ese periplo vital se incluye una escala de varios años en Santiago, de donde era originaria la familia de Carmen. Su padre era Jesús Pereira Vilariño, un destacado profesor de ideales republicanos que estaba casado con María Carballo y sufrió las represalias del franquismo durante la dictadura.

En la capital gallega nació Rodrigo, aunque su pasó fue efímero. La relación se limitó al ámbito familiar y apenas quedan amigos o conocidos de aquellos días.

Con el regreso a Bolivia tras el fin de la dictadura militar, las visitas a Galicia se espaciaron. Y apenas llegó a conocer y a departir con Xosé Manuel Beiras, que desde principios de los años ochenta mantenía una relación estable con su tía Aurora, familiarmente conocida como Aurichu.

Ninguno de los dos protagonistas ha querido detallar su relación personal. Y la influencia política del veterano exlíder del BNG parece escasa en el ideario centrista, absolutamente liberal en lo económico, de Rodrigo.

Casado con Elena Urquidi y padre de cuatro hijos, Paz Pereira tuvo clara la vocación política desde la adolescencia, tras ver cómo su madre sobrevivía a un inexplicable accidente de coche y su padre era el único indemne de la explosión de un avión en Bogotá en un atentado atribuido a la junta militar boliviana.

El aspirante a la presidencia del país andino, que es senador por la provincia de Tarija, vive sus horas más inciertas a la espera de un escrutinio que aún puede hacerse de rogar por el apretado margen que predicen los sondeos. De ganar podrían acento gallego a la política boliviana.