Sánchez reitera que gobernará hasta el 2027 y Junts asegura que la ruptura es «irreversible»

María Salgado
María Salgado REDACCIÓN / LA VOZ

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Pedro Sánchez, este viernes en la Cumbre del Clima que se celebra en Belém (Brasil).
Pedro Sánchez, este viernes en la Cumbre del Clima que se celebra en Belém (Brasil). Antonio Lacerda | EFE

El socialista pide elecciones en la Comunidad Valenciana para «romper la mayoría negacionista» del PP y Vox

08 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Pedro Sánchez está convencido de que bloquear el Congreso no es bloquear el Ejecutivo. El socialista insistió en que presentará unos Presupuestos para el próximo año y seguirá gobernando hasta el 2027 —con cuentas públicas o sin ellas— y pese a la ruptura de Junts, que el jueves anunció que boicoteará 55 proyectos legislativos y este viernes advirtió de que su decisión es «irreversible». «España seguirá avanzando y el Gobierno continuará con su hoja de ruta hasta que termine esta legislatura», reiteró el presidente en una rueda de prensa tras la reunión de líderes previa a la Cumbre del Clima que se celebra en Belém (Brasil).

El jefe del Ejecutivo, que descartó un adelanto electoral pese al bloqueo de los posconvergentes, reclamó, en cambio, comicios anticipados en la Comunidad Valenciana —tras la dimisión de Carlos Mazón por su nefasta gestión de la dana— para «romper la mayoría parlamentaria negacionista» del PP y Vox, dijo, que «ha banalizado, frivolizado y debilitado» la respuesta a los efectos del cambio climático. Sánchez hizo estas declaraciones después de que Santiago Abascal exigiese a Alberto Núñez Feijoo rechazar el Pacto Verde acordado por la Unión Europea en el 2019 como condición sine qua non para respaldar a un nuevo mandatario regional.

El también secretario general del PSOE mostró su «preocupación» por que las negociaciones entre la derecha y la ultraderecha deriven en el desmantelamiento de toda la «arquitectura institucional y presupuestaria» para hacer frente a la emergencia climática en una comunidad autónoma que ya «se ha visto afectada por las consecuencias» de la misma y que ha sufrido la pérdida de 229 vidas en las riadas.

Tomarse en serio a Puigdemont

«España está atravesando uno de sus mejores momentos de los últimos 45 años», defendió el presidente, que apoyó esta afirmación en el crecimiento económico, la creación de empleo, la reducción de la desigualdad y el compromiso con el derecho internacional, y apostó, de nuevo, por la «receta» del diálogo para llegar a acuerdos, a pesar de la decisión de Junts de retirarse de la mesa de negociación en Suiza. «Yo me tomo muy en serio, lógicamente, lo que dicen los grupos parlamentarios, pero creo que el esfuerzo merece la pena y que debemos perseverar en este empeño, porque los resultados están ahí», sostuvo, tras destacar que va a «arrimar el hombro y tomarse en serio el cumplimiento de sus compromisos». De hecho, solo unas horas después de que el partido de Carles Puigdemont decretara el veto a medio centenar de normas en el Congreso, este desbloqueó una de sus exigencias, la ley contra la multirreincidencia, que estaba paralizada desde el pasado febrero, y cuyas enmiendas parciales se prevé que sean estudiadas el próximo miércoles.

Nogueras no va «de farol»

«El Gobierno español no ha cumplido y empezar a hacer las cosas no es cumplir», advirtió la portavoz de Junts en la Cámara Baja, Míriam Nogueras, en declaraciones a RTVE. «Cuando se rompe, se rompe [...]. Quien nos ha llevado hasta aquí, a esta ruptura irreversible, ha sido el PSOE. No hay marcha atrás. Junts nunca en la vida ha ido de farol», sostuvo la mano derecha en Madrid del fugado a Waterloo. «Yo soy muy pesimista con que este Gobierno cumpla los acuerdos. Ojalá nuestro gran problema sea que acaban cumpliendo los acuerdos y que nos tengamos que comer el sapo, pero creo que esto no va a pasar», agregó.

El diputado posconvergente Josep Maria Cruset escenificó este divorcio político publicando en redes sociales una simulación de un videojuego en el que Nogueras noquea a Sánchez; una decisión que los secesionistas explicarán hoy a sus votantes en un centenar de carpas informativas instaladas en municipios catalanes. «Junts no se vende por sillas ni por promesas vacías», indica el argumentario que el partido repartió entre los militantes, que deben justificar la ruptura con los socialistas porque les aporta «dignidad, coherencia y credibilidad». Una tarea que no parece fácil para quienes piensan, como la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que Junts debe reflexionar y «tiene que decidir si quiere ser útil a Cataluña, o al PP y Vox».

Rajoy y Aznar rechazan una moción de censura

El PP —que se niega, por el momento, a un adelanto electoral en la Comunidad Valenciana pese a la dimisión de Mazón— exigió, de nuevo, a Sánchez, que convoque elecciones anticipadas al quedar en minoría tras la ruptura de Junts. Dos expresidentes, Mariano Rajoy (2011-2018) y José María Aznar (1996-2004), sumaron este viernes sus voces a las de Génova para descartar la utilidad de una moción de censura y reclamar al socialista ir a las urnas; una petición que también hizo la presidenta de Extremadura, María Guardiola, quien la semana pasada adelantó las autonómicas para el 21 de diciembre por la falta de acuerdo para aprobar los presupuestos en su comunidad.

En declaraciones a la cadena Cope, Rajoy opinó que no es el momento de presentar una moción de censura pactada entre el PP y Junts porque sus programas «no tienen mucho que ver», apostó por la convocatoria electoral y tachó de «absolutamente disparatado» que no se hayan aprobado las cuentas públicas durante una legislatura. «Este es el período más sombrío desde la aprobación de la Constitución», dijo quien fue desalojado del Gobierno precisamente con una moción de censura presentada por Sánchez en el 2018, tras la sentencia del caso Gürtel que condenaba al PP por beneficiarse de esta trama corrupta.

Durante la inauguración del Máster de Acción Política de la Universidad Francisco de Vitoria, en el municipio madrileño de Pozuelo de Alarcón, Aznar asumió que la legislatura «acabará en el 2027» y argumentó que una moción de censura «no produciría resultados». «Estamos ante un Gobierno radical, populista de izquierdas, que no conoce las normas. Si se respetasen las normas en España, pues evidentemente habría elecciones, pero como no se respetan...», valoró.

El expresidente también aconsejó «centralidad» al líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, a quien encomendó la labor de «armar una mayoría nacional que beba de fuentes del centroizquierda y el centroderecha, con un PP que sea percibido con claridad y coherencia».

«Hay que cambiar al Gobierno»

En el Congreso por el XXX Aniversario de la Unión Europea de Mayores, en Ciudad Real, Feijoo apuntó que si «un gobierno no puede resolver los problemas de los ciudadanos y su presidente está rodeado por sumarios de corrupción, hay que cambiar al gobierno y al presidente».