Honduras elige hoy presidente entre acusaciones cruzadas de fraude
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Hay tres candidatos en empate técnico y un clima de extrema crispación ante la cita con las urnas
30 nov 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Elecciones explosivas en Honduras. El país centroamericano acude a las urnas profundamente polarizado, con tres candidatos en empate técnico que han realizado reiteradas denuncias previas de fraude en una campaña marcada por la fuerte intervención del presidente estadounidense, Donald Trump, en favor de uno de los candidatos.
La población está alerta ante posibles disturbios, como los que tuvieron lugar en los apretados comicios del 2017, que dejaron una veintena de muertos.
Son cinco los postulados para alcanzar la presidencia, pero solo tres llegan con posibilidades: el conservador Nasry Asfura, exalcalde de Tegucigalpa, cuya candidatura ha sido fuertemente patrocinada por la Casa Blanca esta semana, el comentarista deportivo liberal Salvador Nasralla, que afronta sus cuartas elecciones presidenciales, y la exministra de Finanzas y Defensa Rixi Moncada, propuesta por el oficialismo de izquierda radical de la presidenta Xiomara Castro, esposa del exmandatario Manuel Zelaya, depuesto en el 2009 con un golpe de Estado. En Honduras no hay segunda vuelta y la presidencia se decide por mayoría simple.
Seis víctimas mortales
Todos se acusan de estar preparados para cantar fraude y llamar a la movilización. Parte de la población se ha preparado acumulando víveres y guardando efectivo en casa. La campaña ya ha dejado seis víctimas mortales, incluido un niño de 5 años que fue alcanzado por una bala.
Causó especial tensión la petición del Ejército de tener acceso a las actas de votación para supervisar el recuento, algo no contemplado legalmente. La oposición denuncia en bloque que el alto mando militar está influenciado por la familia presidencial y temen algún tipo de acción.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) está liderado por tres funcionarios representantes de los tres partidos en liza, el Nacional de Asfura, el Liberal de Nasralla y el Libre de Moncada. Preside ese trío la funcionaria liberal, que ha rechazado la petición de los militares.
«Las denuncias de posible fraude, las actuaciones agresivas de la fiscalía y de las Fuerzas Armadas y la parálisis dentro del CNE ponen en riesgo el derecho de los hondureños a participar en elecciones libres y justas», señaló en un comunicado Juanita Goebertus de Human Rights Watch.
Sobre las tres formaciones pesa la sombra del narcotráfico. Asfura es heredero político del exmandatario Juan Orlando Hernández (2014 - 2022), que cumple una condena en EE.UU. por narcotráfico; el excandidato liberal en el 2021, Yani Rosenthal, también cumple condena en ese país por lavar dinero y en el 2024 estalló un escándalo cuando se difundió un vídeo de Carlos Zelaya, hermano del expresidente Zelaya, reunido con capos.
En juego un país que ha registrado un ritmo de crecimiento moderado en la última década, aunque la pobreza sigue estancada a niveles del 2019 —seis de cada diez son pobres, a pesar de la fuerte inversión en subsidios del actual gobierno— con una grave crisis de inflación y una violencia que se considera endémica.
Rixi Moncada izquierdista oficialista
La heredera del oficialismo
La exministra de Finanzas y Defensa Rixi Moncada (Tegucigalpa, 1965) acude a las urnas para continuar con las políticas del oficialismo izquierdista de Xiomara Castro, con énfasis en programas sociales y en un mayor protagonismo del Estado en la economía. Propone una Ley de Justicia Tributaria para que «quienes más tienen paguen más impuestos». Sus posibilidades se ven afectadas por el desgaste en el poder, la inflación y la violencia, además de por los casos de corrupción en el seno del oficialismo, mientras en amplios segmentos de la población defienden sus políticas para los necesitados.
Bajo su mando Honduras seguiría siendo aliada de Venezuela, aunque continuaría intentando contrariar lo menos posible a Trump. Uno de los mayores problemas del país es la deportación en el 2025 de más de 30.000 migrantes desde EE.UU. El 25?% del PIB anual se basa en las remesas, y el oficialismo ha tratado de impedir una crisis con Washington. Castro amagó con cancelar el tratado de extradición por los señalamientos de EE.UU. a militares hondureños por narcotráfico, pero al final no tomó la decisión.
Salvador Nasralla Liberal
El comentarista deportivo que se mueve entre dos aguas
El conocido presentador de televisión Salvador Nasralla (Tegucigalpa, 1953) intenta llegar a la presidencia por cuarta vez. Lleva más de una década haciendo campaña con énfasis en políticas anticorrupción, y en esta campaña defiende la creación de una comisión internacional auspiciada por expertos de todo el planeta para luchar contra los corruptos. Su modelo económico está basado en el libre mercado, atraer inversión y reducir la burocracia. Ha hecho campaña defendiendo la mano dura al estilo del salvadoreño Nayib Bukele y a Donald Trump. Por eso sorprendió que el presidente estadounidense lo calificase el jueves de «casi comunista» por haber apoyado a Xiomara Castro en los comicios del 2021 y haber sido hasta el 2024 su vicepresidente, y pidió que no votaran por él.
Su campaña se consideró hundida por unas horas hasta que el mismo Trump la «resucitó» este viernes indultando al ex presidente Juan Orlando Hernández, denostado por amplios sectores conservadores y del que Nasralla ha sido siempre un furibundo crítico. Ahora tiene la opción de ganar el voto de derecha que no quiere ver libre al exmandatario.
Nasry Asfura conservador
El excalde aliado de Trump
Nasry Asfura (Tegucigalpa, 1958) es un empresario de la construcción de origen palestino que ganó notoriedad en la década pasada como alcalde de Tegucigalpa. Dejó el puesto con un fuerte apoyo gracias a un programa intensivo de obras para mejorar el tráfico de una ciudad usualmente congestionada. Era conocido como «Papi a la Orden» por su diligencia a la hora de acercarse a intentar solucionar los problemas de la urbe.
El suyo es un proyecto conservador en lo social y apuesta por la libertad de mercado en lo económico. Propone fortalecer las instituciones investigadoras para reducir la impunidad en un país con cifras de violencia todavía elevadas y construir 550.000 viviendas de interés social en diez años.
El apoyo de Trump podría ser un dardo envenenado. Buena parte de los analistas creen que el indulto al expresidente Juan Orlando Hernández podría generarle más problemas que apoyo por su condena en EE.UU. por narcotráfico y su imagen autoritaria, a pesar de que muchos recuerdan un crecimiento económico sostenido en su mandato y una reducción del índice de asesinatos a casi la mitad.