Principado y ayuntamiento no descartan acciones legales por la fuga de gases de Arcelor

ArcelorMittal ha atribuido a un fallo durante diez minutos en un sensor que ya está en reparación el escape de gases de combustión procedente de las baterías de coque de la siderúrgica que provocó ayer la alarma en el centro de Avilés. Por su parte, la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, que ha admitido el escape ha producido «afecciones a la población», ha iniciado una investigación y ha exigido a la dirección de la multinacional siderúrgica una reunión «urgente» para aclarar la procedencia de la nube contaminante. El Principado «no descarta ninguna otra medida adicional o complementaria que pueda ser necesaria, incluida la remisión de los hechos a la Fiscalía de Medio Ambiente», mientras que el ayuntamiento de Avilés, a la espera de más información, valorará y estudiará igualmente las «acciones legales que correspondan para determinar si ha existido por parte de la empresa algún tipo de infracción relacionada con el medio ambiente o la salud pública».

Las instalaciones fueron inspeccionadas a última hora de ayer por la directora general de Prevención y Control Ambiental del Principado, Elena Marañón, y la jefa del servicio responsable, Paz Orviz, antes de participar en la reunión. Previamente al reinicio de la actividad en las instalaciones causantes del escape, la consejería «exigirá a la compañía garantías de que este incidente no se volverá a repetir», según ha avanzado en un comunicado.

Tras la fuga, la empresa remitió un comunicado a la consejería explicando el incidente, un fallo que afectó durante diez minutos en el sensor de adicción de la fábrica de subproductos de la instalación de baterías de coque de Avilés, «generando un escape de gases de combustión». La multinacional explicaba en el comunicado que como medidas correctoras inmediatas se ha procedido a parar la instalación originadora del escape y se está reparando la sonda. También la Alcaldía de Avilés recibió un correo electrónico explicando la situación.

Por su parte, la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, ha anunciado el estudio de acciones legales en relación con el escape para determinar si ha existido algún tipo de infracción medioambiental o relacionada con la salud pública. La alcaldesa explicaba ayer que, a las 18:45 horas, dos agentes de la Policía Local de Avilés de patrulla en la zona de la plaza de España percibieron la posible existencia de un escape de gases y trasladaron el aviso de la situación a Jefatura, desde donde se contactó con el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias, que activó el protocolo establecido.

Mariví Monteserín contactó telefónicamente con la consejera de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández; con el gerente del área sanitaria III, Enrique González, y con responsables de la planta avilesina de la compañía para recabar información más detallada sobre el alcance y causas del escape. Además, el concejal de Medio Ambiente, Luis Fernández Huerga, contactó con la Dirección General de Prevención y Control Ambiental. Mariví Monteserín se reunirá mañana con los portavoces municipales para trasladarles toda la información disponible. Desde el Colectivo Ecologista de Avilés (CEA) se daba también la alerta sobre los problemas respiratorios originados especialmente a los vecinos que viven en la zona de Llano Ponte, la avenida de Gijón, calle la Libertad, plaza de España y aledaños, además de la gente que estaba en el paseo de la ría de Avilés.

También se ha referido a este episodio el diputado regional de IU Ovidio Zapico, quien ha tildado de «gravísima» la nube de gas y ha reiterado la exigencia de la coalición de la puesta en marcha de protocolos y planes de prevención, así como de una Agencia Medioambiental que dependa de Presidencia.

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