Esther Llamazares, una candidata «disciplinada» y «comprometida»

Álvaro Queipo Somoano

AVILÉS

Esther Llamazares, candidata del PP a la alcaldía de Avilés, hace unos años
Esther Llamazares, candidata del PP a la alcaldía de Avilés, hace unos años

22 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

A Esther Llamazares le brillan los ojos cuando habla de Avilés. Cree en su ciudad, en sus vecinos y en lo lejos que pueden llegar juntos si el objetivo es, únicamente, el bien común de esa ciudad por la que siente real admiración. Su mente es lúcida y cuadriculada, y en su vida hay prioridades innegociables: la familia, los amigos y el trabajo, por ese orden. Porque Esther es más madre que política; más amiga que cargo público y más vecina que concejala.

Es la cuarta de ocho hermanos, y eso la ha marcado de forma inevitable. En su casa hubo amor y cariño, pero también disciplina y orden. Suele repetir que a ella el ego se lo bajó su padre poco después de los diez años y, desde entonces, no hay absolutamente nada que le haga perder el sentido común. Supongo que aquello, que en aquel entonces provocaría su faceta más rebelde, que también la tiene, ayudó a que Esther sea hoy quien es: una mujer muy trabajadora, que no tolera las cosas mal hechas y que lucha contra las injusticias dejándose incluso parte de sí por el camino.

Esther tenía 14 años cuando empezó a trabajar. Fue en un videoclub y en la casa de su dueña. Alquilaba películas de VHS y ayudaba en las tareas domésticas de su jefa. Hoy sigue conservando amistad con ella, y también con su familia. Porque cuando Esther entra en tu vida, ya no sale. Si te quiere, te quiere de verdad. Creo que es otra de sus virtudes, no finge cariño, ni afecto, ni simpatía. Le gusta la gente sincera y, sobre todo, le gusta la gente que no tiene un mal fondo.

Después del videoclub vino la autoescuela. Fue a sacarse el carné de conducir y acabó quedándose a trabajar como personal administrativo. Luego llegó a ser miembro de BNI, responsable de Contabilidad de la Clínica Rozona; directora de marketing y publicidad Real Oviedo; directora general del Real Avilés; delegada territorial de Tactio España; secretaria técnica de la sociedad de geriatría y gerontología del Principado de Asturias y General Manager Alefrés Congresos, empresa que creó y, siendo autónoma, compatibilizó con otros trabajos.

Esther es infinidad de cosas, seguramente alguna que no guste a todo el mundo, pero sobre todo es alguien que se aleja de la notoriedad gratuita. Está más cómoda detrás de las cámaras, aunque la elección que ha hecho no es compatible con su deseo. Ella se adapta y saca su mejor versión, da igual el sector o el área, siempre por lograr su objetivo. Ha cargado con la mochila del autónomo y fueron precisamente los desmanes, los despropósitos y el mal trato que recibió como trabajadora por cuenta propia lo que le hizo dar el paso a la política. Cree que sólo desde ahí se puede mejorar la vida de todos para que nadie pase el trago que en algún momento ella misma sufrió por la mala gestión política, y socialista, del propio Ayuntamiento de Avilés.

Mi amiga y compañera de fatigas políticas quiere ser alcaldesa de Avilés. Y yo creo que el mejor regalo que pudieran hacerle los avilesinos a su ciudad es votarla. Que confíen en ella como yo lo hice un día. Esther, os lo digo desde el corazón, es una apuesta segura.