Con la marcha de Néstor Susaeta, Anquela debe decidir quien será el encargado del balón parado carbayón
09 ago 2017 . Actualizado a las 22:15 h.Si en algo están de acuerdo la totalidad de los técnicos de Segunda División es que el balón parado es un arma fundamental para competir en esta categoría. Tener jugadores que en cualquier córner o falta en la frontal del área te puedan desnivelar un partido es un lujo del que muchos quieren aprovecharse pero que pocos pueden disfrutar. El Real Oviedo tenía a uno de esos jugadores en Néstor Susaeta. El eibarrés podía pasar de puntillas por un encuentro, pero tanto sus compañeros como sus rivales sabían que, en cuanto hubiera un córner o un libre directo, el conjunto carbayón estaba peligrosamente cerca del gol.
Ahora, con la marcha del extremo al Albacete, Juan Antonio Anquela debe buscar otro especialista que acerque al Oviedo a la victoria. "Solo" falta el ejecutor, ya que en el área, los azules disponen de mucho poderío aéreo: Valentini, Carlos Hernández, Verdés, Toché o incluso Ramón Folch son grandes cabeceadores y prometen ser un dolor de cabeza para las defensas rivales.
En lo que va de pretemporada, parece que Aarón Ñíguez ha cogido ventaja en la carrera por ser el encargado del balón parado carbayón. Su gol de falta directa al Lugo en el Emma Cuervo y los peligrosos córners, tensos y dirigidos, sacados en el resto de encuentros ha ilusionado a los oviedistas con la idea de disponer de otro experto lanzador. Otros candidatos son Saúl Berjón y Patrick Hidi. El primero ya ha tenido la oportunidad de sacar alguna falta en esta pretemporada, mientras que la zurda del segundo es uno de los puntos fuertes del jugador húngaro.