
Borja Iglesias es el futbolista clave del Zaragoza de Natxo González
30 sep 2017 . Actualizado a las 01:17 h.Fue uno de los culebrones del verano. El Celta no tenía sitio en su primera plantilla para Borja Iglesias y era el momento para que el delantero gallego (Santiago de Compostela, 1993) se midiera en el fútbol profesional mediante una cesión. Las ofertas no fueron pocas. Tras marcar 32 goles en 37 partidos en su última temporada en Segunda B, equipos como el Cádiz, Osasuna, Sporting, Cultural o incluso el Leganés presentaron su interés, pero finalmente fue el Real Zaragoza el que se llevó el gato al agua.
Poco más de un mes ha bastado para comprobar que el equipo maño no se equivocó con su fichaje. Desde el primer minuto de la primera jornada, en el Heliodoro Rodríguez López de Tenerife, Iglesias ha dado muestras de todo su repertorio ofensivo. A pesar de su 1.87 y su gran envergadura, el ex del Celta es capaz de tirar desmarques continuos como si de un delantero menudo se tratase. También, dadas sus dimensiones, el juego de espaldas es otro de sus puntos fuertes, permitiendo a sus compañeros llegar a campo contrario y asentar así la posesión del Zaragoza.
A todo esto hay que añadirle su indudable olfato goleador. Tras estrenarse en Liga 123 ante el Granada, en la segunda jornada, asombró a la categoría con su actuación en Córdoba, al fin de semana siguiente. Dos zarpazos suyos desde fuera del área le bastaron al equipo de Natxo González para llevarse la victoria del Arcángel. Tras dicho partido no ha vuelto a marcar, salvo en Copa y de nuevo al Granada, pero su juego sigue siendo partido tras partido un dolor de cabeza para todas las defensas rivales.
En la última jornada fue expulsado por doble amarilla, pero Competición le quitó la segunda tarjeta al comprobar que el portero del Nàstic fingió una agresión, permitiendo al gallego estar el lunes en el Carlos Tartiere. Así las cosas, Juan Antonio Anquela deberá pensar cómo parar a uno de los jugadores de moda de la Segunda División, un delantero total.