La localidad sierense, que acoge la mayor colonia china de Asturias con 120 censados, celebra una animada fiesta con ocasión del año nuevo en un ambiente de hermanamiento
18 feb 2018 . Actualizado a las 17:51 h.Dragones y leones desfilan bajo los farolillos rojos con símbolos orientales que adornan la Avenida de Oviedo, vía principal de Lugones. Y los alumnos de la Academia «Habla Chino» cantan canciones y recitan poemas; hay espectáculos de magia, teatro y danza oriental y hasta exhibiciones de wushu lucha. Nada se ha dejado a la improvisación. Todo está perfectamente calculado para que la fiesta con la que la comunidad china recibe el Año Nuevo, el «Año del Perro» sea todo un éxito. Incluso el equipo de fútbol del Real Oviedo se ha sumado a la festividad con la donación de camisetas y balones. Un amplio programa lúdico para conseguir que, por unas horas, se sientan como en su casa. Un variado cartel de actividades incorporado a la Gala de la Fiesta de la Primavera con las que la comunidad china estrecha su relación con los asturianos. Y su epicentro se sitúa en la localidad sierense donde residen 120 personas de un colectivo que integran unas 168 personas en el concejo y alrededor de 3.000 en Asturias.
Una gran carpa, levantada en el párking de DecoAstur, sede del antiguo local de Muebles Genji, se convierte en el centro de atracción de los vecinos que se han incorporado a la fiesta más tradicional del gigante asiático. El consejero Económico y Comercial de la Embajada China en España, Wang Yingqi, recibido con honores en el Ayuntamiento de Siero, es uno de los ilustres invitados que viene a ensalzar la relevancia que la celebración tiene para un colectivo que se mueve principalmente en Lugones y el entorno del polígono industrial de Silvota, donde fluye una importante actividad de tiendas de ropa, bazares y restaurantes regentados por ciudadanos chinos, entre los que se encuentra Wei Ying Huang, autobautizada como Laura en España, una de las organizadoras.
El alcalde de Siero, Ángel García, ejerce de anfitrión y su ejecutivo estudia levantar un monumento o nombrar una calle en honor a la relación entre ambas culturas. La visita del consejero Económico y Comercial de la Embajada China en España, Wang Yingqi, es el espaldarazo a la intención de seguir invirtiendo en la zona.