Ocho integrantes de la Asociación de Pescadores de Riosa y Morcín (ASPRIMO) limpian casi tres kilómetros del cauce a su paso por la zona urbana entre Nijeres y La Ará.
19 sep 2016 . Actualizado a las 13:46 h.Hierros, una sulfatadora, un vídeo BETA, enseres domésticos varios? Éstas son sólo algunas de las cosas que se retiraron en la mañana de este domingo del río Riosa, una limpieza que como cada año desde hace cinco realiza la Asociación de Pescadores de Riosa y Morcín (ASPRIMO). Según ha explicado el presidente del colectivo, Ignacio Fernández, para esta jornada se formó una cuadrilla de ocho voluntarios que recorrieron casi tres kilómetros del cauce sacando en total tonelada y media de basura. La limpieza, concretaba, se realizó en el río Riosa a su paso por la zona urbana, es decir, entre las localidades de Nijeres y La Ará, que es donde más se acumula.
Fernández indicaba que para llevar a cabo esta recuperación del río Riosa en los aproximadamente tres kilómetros que separan las localidades antes citadas cuentan con la colaboración del Ayuntamiento y de Cogersa, que les facilita el contenedor en el que acumular la basura que sacan del cauce y las bolsas.
El presidente de ASPRIMO comentaba al término de la jornada de limpieza la importancia de ser constantes y dedicar una jornada al año a retirar basura. Y es que afirmaba que «se nota que llevamos cinco años haciéndolo porque cada vez sale menos porquería», pese a los 1.500 kilos que aún han sacado del cauce del Riosa. «Sacar toda esa porquería es quitar impacto visual y contaminación al río», manifestaba el representante de los pescadores de Riosa y Morcín, quien matiza que, por supuesto, «también significa mejorar el hábitat para las truchas y para otras especies del río». De hecho, Ignacio Fernández, señala que «el río Riosa tiene un nivel aceptable de pesca viendo como están otros ríos en Asturias».
En buena medida, ese nivel es gracias a la labor que hace la propia Asociación durante el año, ya que ASPRIMO se encarga de llevar a cabo las repoblaciones de trucha en el río Riosa desde hace cinco años, con sueltas de alevines de entre 30.000 y 35.000 ejemplares por año. La última repoblación la realizó el colectivo el pasado mes de julio.