60 trabajadores se despiden hoy del pozo María Luisa

Carmen Liedo LANGREO

CUENCAS

Movilización el 30 de diciembre a las puertas de María Luisa contra el cierre del pozo.Movilización el 30 de diciembre a las puertas de María Luisa contra el cierre del pozo
Movilización el 30 de diciembre a las puertas de María Luisa contra el cierre del pozo Carmen Liedo

Hunosa comenzará el próximo lunes el proceso de traslados hacia Carrio, Aller o Sueros, explotaciones a las que se incorporarán tras pasar por el centro de formación

03 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El cierre técnico del pozo María Luisa entrará la próxima semana en una nueva fase. Si el 30 de diciembre se dejaba de extraer carbón de la emblemática explotación para cumplir con el cierre programado y pactado, el 6 de febrero será la fecha en que den comienzo los traslados de personal de este pozo hacia los tres que Hunosa mantendrá, al menos, hasta finales de 2018: Carrio, Aller y el área de Sueros. Así, 60 trabajadores desarrollarán hoy su última jornada en el pozo langreano puesto que tras un periodo de formación habrán de incorporarse a su nuevo destino, según ha podido saber LA VOZ DE ASTURIAS, periódico que hace unas semanas adelantaba que Hunosa había presentado una lista a la plantilla del pozo con los 140 traslados previstos en total.

Estos primeros 60 trabajadores que dejan María Luisa se repartirán equitativamente entre Carrio, Aller y Sueros, que se incorporarán a los diferentes relevos de estos tres pozos. La siguiente tanda de traslados tendrán lugar el lunes 13 de febrero, en la que saldrán de la explotación de Ciaño otros 40 trabajadores, siendo la mitad para el pozo Aller y la otra mitad para Sueros. Los 140 traslados se completarán el lunes día 20 de febrero, fecha en la que otros 40 trabajadores volverán a dividirse entre las dos explotaciones que Hunosa mantiene abiertas en la comarca del Caudal. Por tanto, el pozo Carrio recibirá sólo a 20 trasladados del María Luisa, mientras que los de Aller y Sueros recibirán 60 cada uno. Todos ellos pasarán unos días por el centro de formación de la empresa.

Finalmente, el proceso de traslado de personal se prolongará durante un mes a fin de encajar a esos 140 trabajadores en las plantillas de los centros de trabajo a los que van destinados, así como en los diferentes relevos. El objetivo de hacerlo progresivamente es trastocar lo menos posible el funcionamiento de cada una de las explotaciones con el incremento de plantilla. En principio las personas trasladadas seguirían haciendo en el nuevo destino las mismas funciones que hasta ahora venían desarrollando en el pozo María Luisa, aunque podrían darse excepciones según las necesidades de trabajo de Carrio, Aller o Sueros.

En la explotación de Ciaño continuarán unos 80 trabajadores de los 240 que tenía hasta el momento, puesto que también se llevarán a cabo prejubilaciones en el transcurso de este 2017. La tarea de quienes continúen en el María Luisa será la de recuperar todo el material y maquinaria del interior que pueda ser aprovechada para alguna de las explotaciones que siguen en funcionamiento, sellar galerías o, incluso, deshullar como parte del cierre seguro del pozo. La estimación es que las labores para el cierre definitivo se prolongarán hasta, al menos, mediados del 2018 por lo que conlleva ejecutar el plan de cierre y abandono de la explotación.