Julio García estrena el cargo de alcalde con el compromiso de entregar en cuerpo y alma y de no ocultarse bajo la sombra de su predecesor, el nuevo secretario general de la FSA
07 nov 2017 . Actualizado a las 07:55 h.Julio García (Tolivia 1969) es desde hace poco más de dos semanas el alcalde de Laviana, un cargo que le llegó casi por sorpresa, tras dimitir Adrián Barbón por su nombramiento como secretario general de la FSA. La responsabilidad que le imprimió que sus compañeros del grupo municipal socialista, la Ejecutiva de la agrupación local y la militancia apostaran por él, le obligó en el mismo grado que le halagó aceptar un puesto que «jamás» pensó que ostentaría. Ahora asegura que está volcado en cuerpo y alma. Señala que tendrá su propia forma de gobernar y no teme que se le compare a Adrián Barbón. Él no e considera un gran político pero, a cambio, ofrece «trabajo, dedicación, esfuerzo y también humildad». Entre sus prioridades, sacar adelante los presupuestos municipales y potenciar el recinto ferial.
-Poco más de dos semanas lleva como alcalde de Laviana. ¿Ya está aclimatado al nuevo cargo y a las nuevas responsabilidades?
-La verdad es que no tuve ni tiempo para aclimatarme. La investidura fue el viernes 20 de octubre y el lunes ya me puse a trabajar en las ordenanzas fiscales para cumplir los plazos, así que hubo que ponerse a ello y a negociar con los grupos, pero prácticamente en ocho días pudimos consensuar una propuesta de impuestos con el resto de grupos, así que no hubo tiempo para acomodarse, y más teniendo en cuenta que el área de Hacienda no era uno de los que yo llevaba antes y, por tanto, no había participado de forma directa hasta ahora en ninguna negociación con el resto de grupos para el tema de los impuestos. Pero como se dice, caminando se hace camino.
-La portavoz de su grupo decía en el pleno de su investidura que tú eres buen conocedor de casi todos los asuntos del ayuntamiento ¿en qué nota el paso de vicealcalde a alcalde?
-Durante seis años he ejercido la labor de vicealcalde y mi labor era de gestión de los asuntos del día a día del ayuntamiento, con lo que tenía un amplio conocimiento. Pero ahora como alcalde surgen otras cosas que hacía Adrián, como la representación en actos institucionales, en lo que yo no tenía ninguna experiencia más allá de estar presente en ellos, aunque sin ser yo el que intervenía. Y eso sí que lo estoy notando ahora porque, además, a los cuatro días de mi nombramiento tuve que participar en la entrega de premios de la Fundación Emilio Barbón. No obstante, estoy muy contento de que ese haya sido mi primer acto como alcalde por la repercusión que tiene la Fundación y porque no deja de ser un homenaje a Emilio Barbón, una persona que significó mucho, no sólo para el PSOE de Laviana, sino que fue un referente para toda Asturias. Me cargó de responsabilidad, pero me sentí muy halagado de que ese fuera mi primer acto como alcalde.
-¿Cómo fue la decisión de aceptar ser el sucesor de Adrián Barbón?
-Fue una decisión que tomé por mis compañeros del grupo municipal y por la responsabilidad que me transmitieron, porque lo digo con el corazón en la mano que jamás pensé que llegaría a ser alcalde de Laviana. Yo empecé aquí para ser el vicealcalde y tenía claro cuáles eran mis funciones y nunca se me pasó por la cabeza que podía ocupar el cargo de alcalde. Después se precipitaron los acontecimientos y cambiaron los planteamientos que había en el grupo municipal socialista, así que mantuvimos una serie de reuniones en las que cada uno expuso quien consideraba que podía ser la persona apropiada para desempeñar el cargo, y me sorprendió a la vez que me halagó que pensaran en mí para una responsabilidad de este calado. A partir de ahí, en vista de que el grupo municipal no sólo me respaldaba, sino que me proponía para el cargo, y que además la ejecutiva y la asamblea de militantes también me respaldaban, porque no hay que olvidar que el partido es quien tiene la última palabra y quien propone al candidato que va a representar al PSOE, pues me decidí a asumir esta responsabilidad. Desde luego, si no hubiera tenido ese respaldo por parte de la militancia no hubiera aceptado bajo ningún concepto. Para mí fue muy importante porque me ayudó a tomar esa decisión, aunque de algún modo también me obligó a dar el paso.
-Decía en el discurso de investidura que Adrián Barbón le había dejado «el listón muy alto». ¿Teme que surjan las comparaciones?
-Cuando dije eso lo dije desde el corazón. Yo trabajé seis años con él, sé cómo trabaja, lo que hizo aquí en el ayuntamiento y lo dije sabiendo lo que decía. ¿Qué me comparen? Puede que surjan, pero también quise dejar claro en ese momento que yo no soy Adrián y que los lavianeses no esperaran de mí la forma de gobernar o de llevar el municipio que había tenido Adrián. Y yo creo que todo el mundo sabe que somos distintos y tendré mi forma de gobernar, eso sí, respetando y al amparo del programa de gobierno con el que nos presentamos los socialistas para gobernar Laviana. Pero evidentemente, la forma de ejecutar ese programa no va a ser la misma, pero no tengo miedo a que se me compare. Adrián es un gran político y yo no lo soy, pero intentaré gestionar con trabajo, dedicación, esfuerzo y con humildad también.
-El caso es que Adrián Barbón ha dimitido como alcalde pero sigue siendo concejal socialista de Laviana. ¿Le da respeto seguir teniendo a su antecesor en el equipo de gobierno cuando, además, es el secretario de la FSA?
-Adrián Barbón y yo tenemos una relación muy estrecha de colaboración y hasta hace cuatro días él era el alcalde y yo el vicealcalde, pero por encima de esa relación está el respeto. Él ahora es un concejal del Ayuntamiento de Laviana y aunque sea el secretario de la FSA sé a ciencia cierta que sabe diferenciar perfectamente los cometidos que tiene y aquí está como un concejal más. Eso no quiere decir que cuando salga del Ayuntamiento es nuestro secretario general y el que marca junto con la Ejecutiva regional las pautas políticas del partido socialista en Asturias. Hoy precisamente estuvo en la comisión de Hacienda y puedo decir que se comporta como un compañero más y no sólo conmigo, sino con el resto de concejales.
-Pero ¿aprovecha que lo tiene ahí para pedirle asesoramiento en según qué asuntos?
-Por supuesto, porque sería absurdo desaprovechar su experiencia, pero exactamente igual que si hubiera sido otro el alcalde y en vez de aquí estuviera en otro puesto de trabajo. Sería absurdo no pedir consejo y, es más, considero que no hacerlo sería una postura poco inteligente.
-Por cierto ¿tiene reordenadas las concejalías?
-Sí las tengo reordenadas, porque junto con las ordenanzas eran las dos prioridades que tenía. Los cambios que haré principalmente son para asignar mis concejalías, porque al ocupar la alcaldía no voy a poder llevar todas esas áreas, así que he distribuido esas competencias que yo tenía entre el resto de compañeros y compañeras. Y algún cambio más voy a hacer, que ha sido dialogado con los compañeros en varias reuniones para tratar de mejorar el gobierno municipal. Esa reorganización la daremos a conocer dentro de unos días.
-¿Sobre qué pilares va a sustentar la Alcaldía durante el año y medio que queda de legislatura?
-Tenemos en torno al 60% del programa de gobierno cumplido y no sé si seremos capaces de llegar al cien por cien porque aventurar eso no es fácil. Pero ya avancé en el pleno de investidura que centraré mi labor de gobierno en tres ejes. El primer eje, modernizar la administración local para que sea más accesible y haya una mejor comunicación con los ciudadanos, intentando que se pueda hacer un mayor número de trámites a través de la administración electrónica y que se puedan abonar algunas tasas a través de internet. No obstante, esa accesibilidad se da también recibiendo a la gente por la tarde, lo estoy haciendo los martes, porque hay gente que por distintos motivos no podía acercase a hablar con el alcalde por la mañana. Es una medida simple pero que va a tener una acogida positiva. El segundo eje es algo que ya venimos haciendo estos seis años de atrás, la apuesta decidida por los pueblos y no sólo plasmándolo en un papel, sino haciendo cosas de verdad, aunque sean obras pequeñas pero que en muchos casos sirven para mejorar la calidad de vida de la gente que vive en ellos. El tercer eje es recuperar la vida y los servicios en Laviana, y ahí juegan un papel importante las asociaciones de comerciantes y hosteleros. Tenemos que trabajar coordinadamente con ellos en todas las actividades que nos planteen y, sobre todo, facilitar los trámites administrativos a la gente que quiere hacer cosas. Es simple y complicado a la vez, pero me parece fundamental porque el ayuntamiento no puede llegar a todos los lados, por lo tanto hay que facilitar los trámites a la gente que quiere generar actividad económica y movimiento de gente porque al final es bueno para todos, eso sí dentro de la legalidad, pero las cosas sean sencillas y la gente se sienta apoyada.
-¿Qué actuaciones o proyectos le gustaría impulsar o sacar adelante en lo que resta de legislatura?
-Uno de mis retos va a ser potenciar el recinto ferial polivalente, que fue la última gran inversión que tuvo Laviana ligada a los fondos mineros y está desaprovechado. Tenemos que sacar todo su potencial, ponerlo a funcionar y que genere actividad económica y eso es algo que ya tenemos hablado con la Asociación de Comerciantes y Autónomos de Laviana. Para empezar, este mes vamos a realizar unas obras con cargo al presupuesto de 2017 por valor de 50.000 euros para mejorar lo accesos, que se pueda compatibilizar el uso municipal del recinto con el de otras actividades comerciales o festivas, y mejoraremos la confortabilidad poniendo un sistema calefactor que nos permita hacer actividades cuando las condiciones climáticas no acompañen y mantener una temperatura en el entorno de los 18 grados en el recinto. También hemos pedido una subvención al Principado para hacer unos servicios dentro del recinto… En definitiva, actuaciones que contribuyan a impulsarlo y que generen actividad económica. Es el principal reto para este año y medio, porque hay otras actuaciones y proyectos que querría sacar adelante, pero opto por la cautela. No quiero lanzar propuestas que suenen muy bien y después tener que desmentirlas. Vamos paso a paso: impuestos, ordenanzas fiscales, presupuestos…
-¿Cómo ve lo de sacar adelante unos nuevos presupuestos?
-Confío que podamos elaborar unos nuevos presupuestos que el resto de grupos municipales vean atractivos porque no olvidemos que necesitamos el apoyo de la oposición para poder aprobarlos. Como primer paso hemos tenido las ordenanzas, que parece que van por buen camino porque como decía en la comisión de Hacienda hemos conseguido consensuar una propuesta. Como ejemplo, en la misma aprobamos por unanimidad de los grupos rebajar el IBI en un 10% de la cuota líquida para las viviendas de los pueblos, y en eso, hay que destacar que todos los grupos tuvieron esa sensibilidad. Pues a continuación habrá que trabajar por los presupuestos, sin parar, y esperó que podamos lograr el mismo consenso con el resto de grupos municipales, porque al final las necesidades que tiene Laviana es algo que conocemos todos, y no creo que haya problema a la hora de elaborarlos. Por mi parte, desde luego, no va a quedar, así que vamos a trabajarlos.
-En el pleno de su investidura como alcalde, el equipo de gobierno recibió muchas críticas por la labor realizada en lo que va de legislatura, sobre todo, de los grupos de la izquierda. Pese a ello, tendió la mano al diálogo y a la negociación …
-Efectivamente la oposición trasladó su visión crítica y entiendo que las prioridades del gobierno local no coincidan con las de la oposición y que eso genera las diferencias. No obstante, tengo que puntualizar que en ningún caso la administración ha estado parada como se nos dijo en estos últimos meses con Adrián o sin Adrián y, además, las críticas vinieron a afear la labor que hacen los compañeros del grupo socialista que se dedicaron en cuerpo y alma a su área y estuvieron trabajando sin parar. Otra cosa es que las prioridades de la oposición no sean las nuestras o no estén en el mismo orden. Eso sí, eso lo admito. Dicho esto, repito que mi mano está tendida al diálogo, eso sí un diálogo sincero, y me voy a esforzar para que sea fluido, como lo ha sido para sacar adelante las ordenanzas fiscales. Para mí será una prioridad dialogar con la oposición para intentar llegar a los acuerdos que beneficien a los vecinos y vecinas de Laviana, porque viendo la situación de Cataluña, los ciudadanos ni quieren enfrentamientos, quieren diálogo y que las fuerzas políticas tenga la capacidad de llegar a consensos. Lógicamente el partido socialista es una fuerza de izquierdas y puede ser más fácil que tenga acuerdos con los grupos que compartan su espacio ideológico, pero tampoco renunciamos a llegar a acuerdos con otros partidos de derecha o de centro derecha. Siempre que beneficie al municipio de Laviana, no hay que cerrar ninguna puerta.
-En un ámbito más político, Barbón también ostenta la secretaría de la Agrupación Socialista de Laviana y la presidencia de ACOM. Por otro lado, está pendiente de que se designe presidente para la Mancomunidad de Servicios del Nalón. ¿Se ve en alguno de esos cargos?
-Mi única prioridad será el Ayuntamiento de Laviana durante este tiempo en el que voy a ejercer de alcalde. Ni me voy a postular para ser presidente de la Mancomunidad, mucho menos para ser presidente de ACOM, aunque por supuesto participaré en los órganos de esta asociación, y en cuanto a la agrupación de Laviana me remito a que sólo una vez coincidió que el cargo de alcalde y secretario general lo ostentara la misma persona, que fue con Adrián Barbón. Yo creo que ahora hay gente dentro de la Ejecutiva actual que tiene experiencia en el partido y que va a hacer una labor muy buena. Yo me veo como alcalde de Laviana que fue para lo que me eligieron en el Pleno y con eso tengo bastante trabajo.
-Aunque todavía está dando los primeros pasos como alcalde, ¿se plantea si optarías como candidato en las elecciones municipales de 2019?
-Por el momento estoy centrado en la responsabilidad que tengo para este año y medio, en intentar estar a la altura de lo que necesita el municipio. De la misma manera que no se me pasó por la cabeza hace dos meses que iba a ser alcalde, tampoco estoy pensando lo que voy a hacer dentro de año y medio. Estoy pensado en sacar adelante todo el trabajo que hay que hacer en el Ayuntamiento, que no es poco.
-Para terminar, antes hablaba del respaldo que recibiste del grupo municipal, de la Ejecutiva y de la militancia para que sucedieras a Adrián pero ¿cómo se tomó la familia que casi de repente pasara a ser el alcalde?
-Tengo que reconocer que tengo el apoyo total de mi familia, porque cuando te metes en un cargo así tienes que tener el respaldo de los de casa, que serán los que tengan que entender las ausencias y los que te tengan que comprender y ayudar cuando el día no haya ido todo lo bien que hubieras querido.