Antonio Suárez: retrato de familia ante «La cuna vacía»

LA VOZ REDACCIÓN

CULTURA

Antonio Suárez, su hija Fernanda y sus nietos, ante «La cuna vacía»
Antonio Suárez, su hija Fernanda y sus nietos, ante «La cuna vacía»

El empresario astur-mexicano, su hija Fernanda y sus nietos visitan las renovadas instalaciones del Bellas Artes, donde se expone el óleo de Menéndez Pidal, propiedad del nieto mayor de Suárez y en depósito temporal

21 jul 2016 . Actualizado a las 18:31 h.

Cuando, el pasado mes de marzo, el Museo de Bellas Artes de Asturias reabrió el palacio de Velarde y la Casa Oviedo-Portal, una de las obras que más llamó la atención en el renovado recorrido expositivo fue el cuadro La cuna vacía, un magnífico óleo de Luis Menéndez Pidal ubicado en el patio de Oviedo-Portal, justo antes del paso al nuevo edificio de la pinacoteca. La obra es un depósito temporal realizado por el empresario astur-mexicano Antonio Suárez aunque, en puridad, no es tampoco su propietario: de hecho, el cuadro pertenece a su nieto mayor, quien lo recibió como regaló después de que el empresario lo adquiriese, a instancias del Bellas Artes, a instancias del Bellas Artes. Hoy, la emotiva imagen familiar que recoge la obra de Menéndez Pidal se ha completado -retrato sobre retrato- con otra estampa de familia: Antonio Suárez, su hija Fernanda, su nieto junto al director del museo, Alfonso Palacio. 

Todos ellos han visitado -en compañía también del cónsul de México en Asturias y León, Jesús Gutiérrez- las nuevas instalaciones del Bellas Artes, con una parada especial ante La cuna vacía, que permanecerá en el museo al menos hasta que su propietario alcance la mayoría de edad. No será, por cierto, el único depósito de Antonio Suárez en la pinacoteca asturiana, que próximamente recibirá en el mismo régimen otras dos obras que regalará a sus otros dos nietos, respectivamente. Durante la visita no se ha aclarado aún cuáles.

«La cuna vacía», de Luis Menéndez Pidal  (1892)
«La cuna vacía», de Luis Menéndez Pidal (1892)

La cuna vacía es una de las más acabadas obras de Luis Menéndez Pidal (Pajares, 1961-Madrid, 1932). La obra, que recibió la medalla de plata en la Exposición Nacional de 1892 es un espléndido interior realista de tema social, monumental y al mismo tiempo intimista, que refleja el drama de la muerte de un niño en un hogar humilde.

 Antonio Suárez (Oviedo, 1942) reside en México desde 1970 y es fundador y propietario de Grupomar-México, uno de los más importantes conglomerados del sector pesquero-industrial y portuario de Latinoamérica. En los últimos años ha apoyado el sector naval asturiano con la contratación de varios atuneros-congeladores a los astilleros Armón y la reapertura de la antigua factoría Juliana Constructora Gijonesa y ha adquirido la empresa de productos de plancha de hojalata Mivisa para la fabricación de latas de conserva. Entre otros reconocimientos, tiene la Medalla de Plata del Principado, la Orden del Mérito Civil, la Órden del Águila Azteca y numerosos reconocimientos en su región natal.