El grupo cierra en la sala La Riviera de Madrid la presentación de su álbum «La vida es fuego»
25 nov 2016 . Actualizado a las 10:36 h.El próximo sábado, 26 de noviembre, a las 20.00, en la madrileña sala La Riviera, la banda Ilegales cierra su gira de presentación de su último álbum, La vida es fuego, que comenzó también en Madrid, el 23 de abril, en el Teatro Barceló, y que hizo que la banda se recorriera, de punto cardinal a punto cardinal, España, ya tocando en salas, ya en festivales. Aún quedan entradas, cuyos puntos de venta y precios pueden verse en los canales habituales, pero el ritmo de venta es alto y no sería extraño que, finalmente, se agotaran.
Un mes antes de comenzar la gira, un infarto fulminaba al bajista de la banda, Alejandro Espina. Al poco, se conocía la elección del grupo: entre depresión y rock and roll, se decidía rock and roll, «en la depresión sabes cómo se entra, pero nunca cuándo y cómo vas a salir», dijo Jorge Martínez, líder enorme, mientras compartía cerveza y charla con este periódico.
El inicio de gira supuso encajar el gancho fatal; la vuelta a la posición del bajo de uno de los suyos, de Willy Vijande; la presentación de las nuevas canciones y la revisión de los himnos añejos (tan vigentes, Virgen de la Santa Resaca, tan vigentes); el rodaje del cuarteto, con la incorporación última, guitarra y teclados, de Mike Vergara; la certera seguridad desde el fondo, en la batería, de Jaime Belaústegui. Y la enésima confirmación de que la figura de Jorge Martínez es inigualable en el panorama musical español: como autor de canciones, como sabio teórico y práctico de la guitarra, como autoridad sin discusión encima de un escenario.
La banda anuncia escasa repetición del repertorio, incluso alguna canción que no ha sonado, relectura de otras. El concierto, como todos los fines de fiesta, promete. El sábado, pues, honraremos, otra más, la sagrada liturgia del rock and roll.
Si les apetece, allí nos vemos.