Bayona, «Tarde para la ira» y Emma Suárez, los triunfadores del cine español

La Voz / EFE REDACCIÓN

CULTURA

JuanJo Martín

«Un monstruo viene a verme» se alza con ocho estatuillas y la protagonista de «Julieta» hace doblete. La mejor película es la dirigida por el debutante Raúl Arévalo

05 feb 2017 . Actualizado a las 01:41 h.

«Tarde para la ira», debut en la dirección del también actor Raúl Arévalo, ha ganado el Goya a la mejor película en la 31 edición de los premios de la Academia de Cine, un premio que se suma a otros los tres conseguidos de los once a los que optaba. «Es un honor recibir este premio», ha asegurado al recibir el galardón de manos de Penélope Cruz la productora de la película, Beatriz Bodegas, que ha dado las gracias a Raúl Arévalo y a todo los que han hecho posible «ese sueño» y ha animado a todos «a seguir haciendo cine porque talento hay de sobra en este país».

El filme, con once nominaciones en total, se ha impuesto a «Un monstruo viene a verme» de Juan Antonio Bayona, «El hombre de las mil caras» de Alberto Rodríguez, «Julieta» de Pedro Almodóvar y «Que Dios nos perdone» de Rodrigo Sorogoyen. La película ha conseguido también los premios a Mejor Dirección Novel, Mejor Actor de Reparto y Mejor Guión Original. Protagonizada por Antonio de la Torre y Luis Callejo, «Tarde para la ira» es un turbio e intenso thriller sobre la violencia y el deseo de venganza que ha pasado por festivales internacionales como Venecia o Toronto.

Sin embargo, la película «Un monstruo viene a verme» de de J.A. Bayona se ha convertido en la gran ganadora al hacerse con nueve de las doce candidaturas con las que partía, entre ellas la de mejor dirección. La cinta de Bayona se ha alzado con el Goya a mejor fotografía, maquillaje y peluquería, dirección artística, dirección de producción, sonido y montaje. 

El propio Juan Antonio Bayona (Barcelona, 1975) se ha alzado con el Goya al mejor director por su tercer largometraje, el drama fantástico «Un monstruo viene a verme». Bayona se ha impuesto en esta categoría a Pedro Almodóvar, nominado por «Julieta», Alberto Rodríguez por «El hombre de las mil caras» y Rodrigo Sorogoyen por «Que Dios nos perdone».

«Quiero agradecer a la Academia por poner el micrófono este año más bajo», con esta broma ha arrancado Bayona un discurso en el que ha manifestado estar «orgulloso» de formar parte de la «familia del cine español». «Es un orgullo representarlo aquí y fuera», ha subrayado. «Se lo dedico a toda la gente que nos ha apoyado en un proyecto que era complicado, era la historia de un niño que consigue vencer al peor de los monstruos con un lápiz, y quiero dedicárselo a toda la gente que combatió ese monstruo mientras preparábamos esta peli», ha dicho.

Bayona ha tenido también un recuerdo para su familia, en especial para su padre, quien le enseñó a «utilizar el lápiz, a dibujar, al poder transformador de la cultura para bien». «La cultura es necesaria, seríamos incapaces de expresar quienes somos y como sentirnos. Y tenemos que apoyarla todos», ha insistido.

Emma Suárez ha sido la otra gran triunfadora. Se ha proclamado ganadora a la mejor actriz protagonista por su papel en «Julieta» de Pedro Almodóvar y se ha convertido en la segunda actriz en lograr en la misma gala un segundo Goya, tras el de actriz de reparto por «La próxima piel». «Qué está pasando esta noche», se ha preguntado la actriz, tras recoger en el escenario de manos de Pedro Almodóvar su estatuilla. «Muchísimas gracias por este personaje que tanto sufre en la pantalla y gracias por ser tan exigente, minucioso, impecable y tan difícil a veces, porque eso hace que una lo pase fatal y quiera mejorar», ha dicho. Ha compartido su premio con todo el equipo técnico de la película, con todas sus «miradas cómplices», y los actores y actrices y a su familia, «que está entusiasmada».

Suárez (Madrid, 1964) se ha impuesto como protagonista a Carmen Machi por «La puerta abierta», Bárbara Lennie por «María y los demás» y Penélope Cruz por «La reina de España». En la historia de los premios, solo en una ocasión ha habido un doblete como este: en 1988 con Verónica Forqué, que ganó el de actriz protagonista con «La vida alegre», y el de mejor secundaria por «Moros y cristianos».