El Bellas Artes hace sitio a la obsesión por el vacío de Chillida

LA VOZ REDACCIÓN

CULTURA

Alfonso Palacio, Vicente Domínguez y Leopoldo Tolívar Alas, ante «Alrededor del vacío I», de Chillida
Alfonso Palacio, Vicente Domínguez y Leopoldo Tolívar Alas, ante «Alrededor del vacío I», de Chillida

El museo acoge como «Obra Invitada» la escultura «Alrededor del vacío I», cedida durante cuatro meses por su homólogo bilbaíno

07 mar 2017 . Actualizado a las 19:31 h.

Un vacío, y en torno a él una precisa estructura de acero y el espacio que los rodea. Esa es, en esencia, la forma de la «Obra Invitada» que desde ayer y hasta el mes de junio ocupará un lugar de honor en la ampliación del museo de Bellas Artes de Asturias. Su autor es el escultor vasco Eduardo Chillida (Donostia, 1924-2002), y su título, Alrededor del vacío I como corresponde a una pieza que inicia una serie de cinco especialmente interesante en el contexto de la obra del artista. Forma parte de los fondos del Museo de Bellas Artes de Bilbao y ha sido presentada hoy en un acto que ha contado con la presencia del viceconsejero de Cultura, Vicente Domínguez, y de patronos del Bellas Artes.

Alrededor del Vacío I aportará durante estos cuatro meses al recorrido contemporáneo del museo la presencia de quien el centro recibe como «figura clave en la escultura del siglo XX, continuador de la tradición escultórica en hierro iniciada por Picasso, Julio González y Pablo Gargallo». La obra del autor del Elogio del horizonte que cede el museo bilbaíno es la primera escultura de un conjunto de cinco piezas ejecutadas por el artista entre 1964 y 1969 y, como señala el Bellas Artes, «pese a su reducida escala, se trata de una obra monumental que muestra una de las principales preocupaciones de Chillida: "definir el espacio en base a sus límites y en concreto, en este caso, alrededor del espacio vacío"».

El programa «La Obra invitada» desarrollado por el mueso asturiano tiene como misión traer durante un periodo aproximado de tres meses destacadas obras procedentes de coleccionistas particulares o de otras instituciones nacionales e internacionales que contribuyan a reforzar el discurso de la colección permanente, bien porque permitan profundizar en aspectos ya contemplados por la colección o bien, como en este caso, porque permitan cubrir lagunas que en ella puedan detectarse.