«Verano 1993», «Los últimos de Filipinas» y «Abracadabra», precandidatas a los Oscars

EFE / Europa Press

CULTURA

El 7 de septiembre se dará a conocer el título de la cinta que definitivamente representará a España en los premios cinematográficos

17 ago 2017 . Actualizado a las 23:25 h.

Una de las tres irá a los Oscars para competir por la Mejor Película de Habla no Inglesa. 1898. Los últimos de Filipinas, Abracadabra y Verano de 1993 son las tres películas preseleccionadas por la Academia de Cine de entre los 42 largometrajes estrenados entre el 1 octubre del 2016 y el 30 de septiembre del 2017.

Así lo anunció este jueves la presidenta de la Academia del Cine, Yvonne Blake. No será hasta el próximo 7 de septiembre cuando conoceremos el título de la cinta que definitivamente representará a España en la próxima edición de los premios, que este año celebran su 90 aniversario.

El año pasado, los tres largometrajes incluidos en esta preselección fueron El Olivo, La novia y Julieta, siendo esta última la elegida finalmente. No obstante, la película de Almodóvar no consiguió colarse entre las favoritas de la Academia de Hollywood.

Una comedia y dos óperas primas, una terna «atípica»

Pablo Berger, director de Abracadabra y el único de los tres preseleccionados con experiencia en Hollywood -Blancanieves fue seleccionada en el 2012, aunque no pasó el filtro de la Academia americana- ha considerado tras hacerse públicos los títulos que las tres finalistas son una opción «bastante atípica». «No sé si Abracadabra es arriesgada o conservadora, pero sí que es personal y libre», ha señalado. «Verano 1993 también es muy diferente del cine más comercial, y 1898. Los últimos de Filipinas es una película de época, que tampoco es muy común en España», ha añadido.

Si Berger está de «subidón absoluto» tras conocer la noticia, para Salvador Calvo es «un placer y un honor» que hayan preseleccionado su ópera prima, 1898. Los últimos de Filipinas. El director ha visto y admira a sus competidoras: «Son dos peliculones», ha considerado.

También la debutante Carla Simón ha delegado sus primeras palabras en su productora ejecutiva, María Zamora, quien ha considerado que Verano 1993 es una película que transmite «mucha verdad, lo que no ocurre con tantas».

«La Academia ya la acogió con sorpresa cuando la pasamos aquí y les gustó mucho, no se esperaban una película tan bonita y tan bien contada, tan pequeñita», ha señalado Zamora, quien ha añadido que Simón está promocionando la cinta en varios festivales de Latinoamérica y la noticia le ha pillado en plena madrugada en Chile.

Verano 1993 es una película intimista que cuenta la historia autobiográfica de la propia directora, unos días en el verano de aquel año en el que, de niña, tuvo que trasladarse a vivir al campo con su tío, la esposa de éste y su pequeña prima, tras la muerte de sus padres a causa del sida.

En las «antípodas» de esta, considera el debutante Calvo, se sitúa 1898. Los últimos de Filipinas, una superproducción histórica basada en la resistencia que el último destacamento español en la colonia de Filipinas, en el pueblo de Baler, opone a los revolucionarios locales durante 337 días, sin saber que España se había rendido.

Abracadabra, de Pablo Berger, que está recién estrenada y con buenos datos de taquilla, es claramente la apuesta más arriesgada de los académicos, no solo porque se trata de una comedia, sino por el carácter abiertamente surrealista o «hipnótico» de la cinta. Cuenta la historia de un hombre que acaba siendo poseído por un espíritu durante una sesión de hipnosis «chusquera» con la que el invitado a una boda quiere amenizar a los invitados.

Berger confía en que la preselección ayude a que más gente acuda a las salas a ver su película, estrenada hace dos semanas y situada entre las diez más taquilleras, junto a superproducciones como Spiderman o Dunkerque. «La palabra Óscar es un imán para el público, y al final los directores lo que queremos es llegar al mayor número de gente posible», ha señalado.

De la misma opinión es Salvador Calvo, quien ha contado cómo su cinta, después de recaudar más de dos millones de euros en taquilla, está ahora en la plataforma Netflix y «pronto se emitirá en Televisión Española».

María Zamora ha explicado que, además de los premios internacionales, entre los que se cuenta a la mejor ópera prima de la pasada Berlinale, Verano 1993 logró recaudar más el segundo fin de semana de exhibición que el primero, algo también insólito y que demuestra «que ha funcionado el boca a oreja». Hasta hoy, la cinta ha sido vista por unos 80.000 espectadores y sigue proyectándose en treinta salas.