«Se ha abierto la veda en el cine, pero el acoso sexual se produce en todos los mundos»

J. C. GEA GIJÓN

CULTURA

Isabel Coixet, junto a Alejandro Díaz Castaño, en el FICX
Isabel Coixet, junto a Alejandro Díaz Castaño, en el FICX

Isabel Coixet, que acude al FICX para recibir el Premio Mujer de Cine, lamenta la «precariedad» y las dificultades de las cineastas

25 nov 2017 . Actualizado a las 17:44 h.

Seguramente hace solo un par de semanas, a Isabel Coixet se la hubiese cosido a preguntas sobre Cataluña; pero esta mañana, en la última rueda de prensa del Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX), la realizadora catalana ha hablado sobre todo de ser mujer. Y, secundariamente, mujer cineasta. No solo por el influjo de la fecha -el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres- sino también porque Coixet ha vuelto al certamen gijonés para recoger en su ceremonia de clausura el Premio Mujer de Cine 2017 la entidad del mismo nombre, que la propia cineasta presidió. Y además porque desde que saltó el escándalo Weinstein y su rosario de denuncias por acoso sexual, no se habla de otra cosa. Pero Coixet ha querido poner el asunto en su sitio.

«Me parece cojonudo que se abra el diálogo, creo que ya era hora, pero lo que me importa es que esto tiene que servirnos a todos para a) saber lo que está pasando y b) para hablar sin tapujos y sin miedos», ha dicho Coixet en el Antiguo Instituto Jovellanos.  Lo que cuenta es «que se haya abierto la veda en el cine porque en el cine es todo más vistoso; parece más relevante que denuncie Gwyneth Paltrow que una cajera del Día, pero lo que hay que saber es que estas cosas ocurren en todos los mundos». Abriendo el angular, Coixet ha abogado por «dar a las mujeres armas mentales para que puedan frenar la violencia machista» y educar a las generaciones más jóvenes en valores de igualdad. La realizadora y productora ha animado a «no tener miedo  a hablar». «¿Qué se tiene que hacer? No lo sabemos. Pero tenemos que estar amparadas en un sistema en el que cualquier cosa que ocurra no tiene que caer en saco roto: las mujeres tienen que tener confianza en su entorno, policía, medios para hablar sin miedo a que al día siguiente le vayan a rajar el cuello».

«Harvey Manostijeras»

Con humor, la premiada ha recordado a Weinstein -a quien ha apodado como «Harvey Manostijeras» por su propensión a «destrozar» las películas que produce- «robando una chocolatina y comiéndosela allí mismo» en un centro comercial de Nueva York. Pero, por lo demás, ha recalcado que no es ese asunto el que le parece prioritario a la hora de hablar de mujeres en el cine. «Lo que importa es cuántas mujeres dirigen, cuánto nos pagan, en que gueto estamos en la historia del cine», ha asegurado Coixet, con otra anécdota.

«Me invitaron a hacer el prólogo para un libro italiano en el que se citan con emoticonos 100 películas de historias del cine. Dije que sí, a cambio de que me dejaran contar que entre ellas no había ninguna dirigida por una mujer. No contamos. No veo por qué Ben-Hur tiene que ser mas importante que Cleo de 5 a 7 de Agnes Varda. Para mí no lo es», ha relatado.

Isabel Coixet ha dicho estar harta de algunas otras situaciones asociadas a su condición de mujer cineasta. «Cuando te dicen "es que no paras de trabajar" como si le estuvieras quitando el pan. Eso a un hombre no se lo dicen. ¿Por qué no se lo dicen a Spielberg, si hace 25 películas seguidas? O cuando me preguntaban qué hacía con mi hija en los rodajes. Pero, mecagüenlamar, ¿esto se lo preguntáis a un hombre? ¡Que Spielberg tiene cinco hijos! Pues no, no se le ha preguntado»

La cineasta ha acudido además a defender una la película que coproduce, Nadie nos mira, de la argentina residente en Nueva York Julia Solomonoff que clausura esta noche el certamen gijonés. Coixet ha asegurado que «hacer el segundo proyecto es ocho veces más difícil para una mujer directora de cine que para un hombre» y ha lamentado la vida «dura y precaria» que llevan las cineastas en España, aunque también empieza a apreciar «cierta igualdad».

Isabel Coixet recibe el Premio Mujer de Cine por haber «sabido dar voz a las mujeres a través de la creación de personajes femeninos alejándose de etiquetas y modelos prefabricados». Este premio, que ha alcanzado su séptima edición, nació al abrigo de la organización Mujeres de Cine para promocionar y visibilizar el trabajo en la industria cinematográfica, y ha galardonado ya a las realizadoras y guionistas Josefina Molina y Cecilia Bartolomé, la figurinista Yvonne Blake, la montadora Carmen Frías, la representante Katrina Bayonas y la actriz Mercedes Sampietro.