Familiares, amigos, artistas, compañeros de militancia y representantes politicos se despidieron del artista en una multitudinaria ceremonia celebrada en el tanatorio de Gijón
23 feb 2018 . Actualizado a las 07:07 h.Sin solemnidad, con palabras sentidas, versos propios y otros de García Lorca, algo de música y, sobre todo, espontaneidad: una espontaneidad que permitió incluso que el último adiós a Alejandro Mieres concluyese con la inesperada pero igualmente sentida interpretación de unas estrofas de Un velero llamado Libertad cantadas a capella junto al féretro del artista por Kiti de la Concha, cuñada del pintor. Así discurrió la ceremonia con la que familiares, amigos, compañeros de profesión y militancia y una representación institucional encabezada por el consejero de Cultura, Genaro Alonso, y la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, despidieron en el tanatorio de Cabueñes al nonagenario artista y docente fallecido el pasado martes en Gijón. Pero sin duda el momento más hermoso y emotivo de la tarde lo protagonizó la hija del artista, Rosa, al dar lectura a un texto escrito por su hermano Juan, también pintor. En él, evoca la niñez y el descubrimiento de la belleza y l arte junto a un padre que era «radicalmente diferente» al de los otros niños porque «pintaba con la luz» como una mezcla de «alquimista, artesano y mago».
«Papá, seguiré siempre tu ejemplo y para mi eres eterno, porque el tiempo pasa y del hombre lo único que perdura es el arte, lo bello siempre es bello», concluyó Rosa Mieres, haciendo suyas las palabras de su hermano. Antes de ella intervinieron, entre otros, el poeta Francisco Álvarez Velasco, que recitó los haikus compuestos por Alejandro Mieres como testimonio de su faceta literaria; Emilio Amor, que declamó Cuerpo presente, la tercera elegía del Llanto por Ignacio Sánchez Mejías de Lorca, el poeta favorito del pintor: Joseba Ayensa o Armando Vega.
Entre el público les escuchaban numerosos artistas de distintas generaciones y tendencias: entre otros, Bernardo Sanjurjo, Ánxel Nava, Francisco Fresno, Melquíades Álvarez, Reyes Díaz, Pepa García Pardo, Fernando Redruello, Manuel Linares, Mabel Álvarez, Josefina Junco, José Paredes, Carlos Coronas, la actual presidenta y sucesora de Mieres en la Asociación de Artistas Visuales de Asturias, Consuelo Vallina... También políticos, con una amplia representación del socialismo gijonés: el expresidente del Principado, Pedro de Silva, la concejala Lara Álvarez, la exconsejera y exconcejala Mercedes Álvarez, los exconcejales de Cultura Manuel Muruáis y Justo Vilabrille, los también exediles Dulce Gallego, Daniel Gutiérrez Granda... Además de la concejala de Cutura, Montserrat López, la corporación estuvo representada por el portavoz municipal del PP Mariano Marín. Y amigos, críticos de arte, escritores o músicos y amigos y allegados a un hombre que siempre cultivó la sociabilidad, la conversación o el debate.
Sus restos, despedidos con un aplauso antes de ser incinerados, reposarán junto a los de su esposa, Rosa Velilla, en los terrenos de la casa que ambos compartieron en el Alto de la Madera.