La coordinadora de rescates de Médicos Sin Fronteras, denuncia la criminalización de las oenegés que operan en el Mediterráneo antes del inicio de las deliberaciones de un galardón que, por el momento, no deja caer favoritos
08 may 2018 . Actualizado a las 14:55 h.Sin favoritos, por el momento. Las puertas del salón de deliberaciones del Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2018 se han cerrado poco antes de este mediodía con el mantra habitual -«variedad y calidad» en el hotel de la Reconquista. Allí discutirá el jurado internacional durante toda la jornada de hoy y antes del mediodía de mañana las 26 candidaturas de 17 nacionalidades propuestas para el galardón que el año pasado se llevó la Hispanic Society of America, cuyo director, Mitchell Codding es uno de los debutantes en el tribunal junto al exministro y expresidente del Europarlamento Josep Borrell, Maite Arango García-Urtiaga, Daniel López-Acuña, Teresa RIbera, Mbuyi Kabunda Badi y Beatriz Domínguez-Gil González, directora de la Organización Nacional de Trasplantes de España, receptora en 2010 del premio que reconoce «la labor, individual o colectiva, con otro u otros, de desarrollo y fomento de la salud pública, de universalidad de la educación, de la protección y defensa del medio ambiente y del avance económico, cultural y social de los pueblos».
Además de los mencionados, el jurado está compuesto por Emilio Lamo de Espinosa, Jerónimo López Martínez; Jaime Montalvo Correa, Rafael Sánchez Ortega; Luis Sánchez-Merlo Ruiz, Gustavo Suárez Pertierra, que lo preside, Rosa María Calaf Solé, que actúa como secretaria, y la Coordinadora de Operaciones de rescate de Médicos Sin Fronteras en el Mediterráneo, y Paula Farias Huanqui, coordinadora de operaciones de rescate de Médicos Sin Fronteras. En su opinión, el jurado debe manejar criterios que reconozcan la «labor ejemplarizante» de «personas u organizaciones pueden resultar inspiradoras o provocar transformaciones». Para Farías, es la «riqueza» de unos premios que deben «poner el foco en esa búsqueda de referente».
«Cinismo tremendo»
Pero dicho esto, Farías Huanqui ha realizado las declaraciones más contundentes de la mañana a propósito del proceso en el que tres bomberos españoles acaban de salir absueltos de acusaciones de tráfico de personas en Grecia y de otras causas similares, Paula Farias ha tenido palabras duras para el «naufragio moral» de una Europa que «criminaliza» a organizaciones que «tratan de cubrir el hueco de las instituciones» en el rescate de personas en el Mediterráneo y otros puntos del planeta. «Es el síntoma de un ejercicio de cinismo tremendo que está haciendo Europa», ha añadido la activista de Médicos Sin Fronteras, para la que los europeos están «cerrando los ojos a una realidad» que criminaliza con «un fin disuasorio» a «organizaciones humanitarias que son testigos de alguna manera de lo que pasa» y a «gente que se lanza al agua y se presta a devolver la dignidad» a quienes intentan alcanzar el continente europeo.
«El Mediterráneo a día de hoy es un lugar más peligroso que ayer, y Europa mira hacia otro lado y permite que toda esa gente que huye de una realidad tan tremenda, como la Libia, sea retornada a ese no país, a ese país sin garantías, violando todo tipo de legislación», ha denunciado Farias Huanqui, quien añade que el principio de no devolución a lugares no seguros está siendo de este modo incumplido por Europa.
La responsable de la Organización Nacional de Transplantes también ha puesto una nota de denuncia en la previa de las deliberaciones al asegurar que «sigue siendo un reto mundial poder afrontar convenientemente las necesidades de trasplantes de los pacientes, y la disparidad entre oferta y demanda de órganos es la causa de que muchos se enfrenten a una muy pobre calidad de vida con riesgo de fallecimiento». Respecto a los premios, Domínguez-Gil ha calificado como «muy atractivas» candidaturas entre las que «desde luego muchas cuentan con una labor humanitaria y con otras características», mientras que Mitchell Codding ha añadido por su parte que es «difícil» decidir cuál es el mejor candidato, se ha limitado, por su parte, a señalar Mitchell Codding, que habla de aspirantes «muy buenos y de muy diversos campos».
