Rosa María Mateo: «No soy podemita, no soy socialista, no soy nada»

La Voz REDACCIÓN

CULTURA

VICTOR LERENA | EFE

La administradora de RTVE, ante los ataques del PP, defiende su imparcialidad

25 sep 2018 . Actualizado a las 23:22 h.

La administradora única provisional de RTVE, Rosa María Mateo, ha defendido la independencia de su gestión y ha advertido a todos los grupos políticos de que no va consentir que quieran controlar la corporación pública ni que le den órdenes. «Yo vengo aquí a decir la verdad [...] Soy independiente y nadie me va a dar órdenes, ni ustedes ni nadie», dijo ante la Comisión Mixta de Control de RTVE, en la que acusó a los políticos de que les importa «muy poco» la televisión pública y de que solo se interesan por ella «cuando la pueden controlar».

«Los trabajadores de RTVE estamos un poco cansados de todos los políticos, perdonen que se lo diga», subrayó Mateo, que negó haber dado ninguna instrucción a los servicios informativos. También rechaza las acusaciones sobre que ha recibido órdenes desde el PSOE para llevar a cabo su gestión, «algo que no ha ocurrido ni va a ocurrir». Antes los ataques se defendió con contundencia: «No soy podemita, no soy socialista, no soy nada. Soy una ciudadana que cree sobre todo en la libertad de los seres humanos [...] Creo profundamente en la libertad y quiero decirles que mi libertad les beneficia».

La de ayer fue su primera rendición de cuentas ante las Cortes desde su designación el pasado julio. Ante los reproches de que ha hecho una purga, al cambiar a 38 cargos directivos, la administradora única provisional argumentó que los ceses y nombramientos que ha ejecutado se sustentan en criterios profesionales y no pueden ser calificados de purga. «Purga significa gulag, estalinismo, nazismo, fascismo, franquismo, pinochetismo, campos de concentración, abuso de poder y en definitiva dictadura [...] Los cambios son habituales en las empresas públicas y privadas; los cargos no pertenecen a nadie en propiedad», incidió.

«Ha habido manipulación»

Rosa María Mateo, «consciente de la trascendencia y provisionalidad de un reto tan complejo», sostuvo en su comparecencia que los trabajadores de RTVE defienden el periodismo independiente y el concepto de radiotelevisión pública «con uñas y dientes» y advirtió a los parlamentarios de que les daña una «televisión manipulada que esté al servicio del poder o del Gobierno de turno». En ese sentido, recordó su entrada en TVE: «Con el dictador vivo había censura, luego lo que ha habido es manipulación, unas veces más fuerte, otras menos», matizó.

Tras insistir en que «está de paso», deseó que el concurso público para designar un nuevo consejo de administración de RTVE culmine «cuanto antes» para que su mandato provisional dure «el menor tiempo posible».

«Persecución implacable»

Para el portavoz del PP Ramón Moreno, los ceses y nombramientos acometidos por Mateo son «delirantes y bochornosos» y responden a una «persecución implacable y humillante», y el «fruto directo de esa purga» es que RTVE se ha instalado en una «manipulación continua» que ahora practica «un descarado seguidismo del Gobierno socialista».

«La purga ha sido brutal, feroz y desconsiderada hasta la grosería [...]. Con un concurso público en marcha ha provocado un aluvión de ceses tintados de vulgar revancha que parece una especie de venganza colectiva», criticó ayer. Su grupo acusó a Mateo de imponer un «estilo Stalin» en la corporación pública y de haber quemado su prestigio profesional en apenas treinta días.