1969, el último gran año de la era pop

Javier Becerra
JAVIER BECERRA REDACCIÓN

CULTURA

Durante los próximos doce meses se cumplen 50 años de muchos discos que están considerados obras maestras indiscutibles. Seleccionamos diez de ellos para recordarlos, disfrutarlos y asombrarnos con su contenido una vez más

10 ago 2019 . Actualizado a las 15:17 h.

No existe en la historia de la música pop un momento exacto en el que las cosas cambian de un día para otro, pero sin duda el paso de los años sesenta a los setenta se toma como un puente quebradizo. Después de tres años pletóricos de música colorista y sorprendente, esa joven manera de expresión alcanzaba al final de la década advirtiendo una mutación. Se pasaba de la era pop a la era rock. Los Beatles se empezaban a desintegrar, trabajando por separado y dando signos de ruptura inminente. Mientras, los Rolling Stones, liberados ya de la competición con los Fab Four, decidían seguir mirando a las raíces para construir un sonido que los iba a convertir en la banda más grande del planeta.

En paralelo, las guitarras empezaban a sufrir una transformación. Enredándose en una sofisticación nunca antes conocida, con los primeros álbumes de bandas como Yes o King Crimson. Endureciéndose y patentando lo que sería el heavy-rock, con el advenimiento de formaciones como Led Zeppelin o Deep Purple. O anticipando una agresividad que, años mas tarde, explotaría en el punk con las dentelladas de The Stooges o MC5. Todo con la idea del cambio hippy que estaba a punto de desvanecerse, pese a celebrarse ese año el gran hito de Woodstock. También las primeras muertes de mitos roqueros víctimas de sus excesos, como Brian Jones, que ingresaría en la macabra lista del Club de los 27. Y, por supuesto, con la consolidación total del elepé como formato definitivo, multiplicando el negocio y las ganancias de una industria musical entonces esplendorosa.

En ese zigzag se cocieron un puñado de discos emblema, obras maestras que marcan picos en la carrera de sus artistas por diferentes razones. Pero al contrario de lo que sucedía en 1967, por ejemplo, no parecía existir un patrón común. El melón se había abierto. Los caminos individuales se trazaban sin necesidad de cruzarse. Por ello, resulta tremendamente atractivo acercarse a la producción discográfica de esos doce meses en los que se dibuja el pasado y el futuro de una manera tremendamente nítida para la visión histórica.

Es probable que a lo largo de este 2019 se reediten varios de estos títulos con la excusa del 50.º aniversario. Del mismo modo que le tocó al White Album de The Beatles y el Beggars Banquet de los Rolling Stones el año pasado, no terminará este curso sin que Abbey Road y Let It Bleed estén de nuevo en el estante de discos. Otros como Tommy (The Who), Vol I y II (Led Zeppelin) o The Velvet Underground (The Velvet Underground) ya han sido objeto de reediciones recientemente. En todo caso, escucharlos supone enamorarse de nuevo de álbumes que le dan a la palabra grandeza todo su significado.

DIEZ TÍTULOS IMPRESCINDIBLES

1. «ABBEY ROAD» | THE BEATLES

 Las fricciones eran evidentes, pero el talento de los cuatro permanecía intacto. Es el disco de Come Together, Here Comes The Sun, Something y Because, piezas sobresalientes en un disco con puntuales desvíos a la ensoñación (Sun King), rayazos de electricidad (I Want You) y la típica gracieta beatle (Octopus’s Garden).

2. «IN THE COURT OF THE CRIMSON KING» | KING CRIMSON

Disco totalmente aparte, el debut de King Crimson arranca con una abrasiva mezcla de jazz y rock duro que da paso a una serie de sonidos nunca antes escuchados. Psicodelia y lirismo, flautas y melotrones, apocalipsis y escapismo. Un nuevo lenguaje empezaba aquí.

3. «VOL. II» | LED ZEPPELIN

 Aunque posee un lado luminoso y hasta folkie, este disco será siempre el álbum de las guitarras poderosas y pesadas trenzando riffs maestros. También el de la voz agudísima y potentísima de Robert Plant y la batería pilón de John Bonham. En el mismo año el grupo también lanzó el Vol I, otra joya imprescindible para la colección.

4. «THE VELVET UNDERGOUND» | THE VELVET UNDERGOUND

 Después de editar White Light /White Heat, consideraba la biblia negra del rock, Lou Reed toma los mandos y lanza un disco resacoso, calmo y con unas dosis de belleza apenas perceptible en momentos puntuales de su álbum de debut. Aún así, hay momentos para el músculo en What Goes On y la zozobra en The Murder Mistery.  

5. «CROSBY, STILLS & NASH» | CROSBY, STILL & NASH

Con ellos (provenientes de Buffalo Springfield, The Byrds y The Hollies) nació la idea del supergrupo rock, florecieron canciones maravillosamente melódicas y vio la luz este hermoso disco que siempre apetece volver a escuchar. Se trata de uno de los álbumes que mejor capturan el espíritu optimista de cambio de Woodstock.

6. «LET IT BLEED» | THE ROLLING STONES

 Si en el anterio,r Beggars Banquet, se habían bajado del tren pop para rebuscar su personalidad en el blues, el country y el folk, en este solidifican las intenciones. En medio, se desvían en dos (gloriosas) ocasiones: el rock-soul de Gimme Shelter y la balada suprema You Can’t Always Get What You Want.  

7. «THE STOOGES» | THE STOOGES

Tomando el testigo de la Velvet Underground, The Stooges le inyectaron al rock una nueva dosis de electricidad, sexo, violencia y descontrol. «Es 1969, de acuerdo / Otro año sin nada que hacer», canta de inicio Iggy Pop. Ante esa situación optaron por sacar el látigo y golpear en la espalda de la nueva generación. El punk ya estaba ahí. 

8. «TOMMY» | THE WHO

 Otro ejemplo perfecto de los cambios que estaban por llegar se encuentra en este álbum. Se trata de la primera ópera rock de The Who, en donde muestran que van mucho más allá del grupo de pop al uso. Un chico se queda sordo, mudo y ciego tras un episodio traumático y pasa por todo un proceso de búsqueda. Dio pie a una película.

9. «AT SAN QUENTIN» | JOHNNY CASH

 No era la primera vez que actuaba y grababa en una cárcel. Antes estuvo At Folsom Prison, pero el artista quiso repetir y registró su emocionante pase en la prisión de San Quentin. Cuando Cash canta «San Quentin, ojalá te pudras y ardas en el infierno / Que tus muros caigan y pueda vivir para contarlo», la piel de gallina pide paso.

10. «KICK OUT THE JAMS» | MC5

Aliado de The Stooges en su misión de dinamitar el rock, el grupo debutó con un disco en vivo. Totalmente justificada la decisión, ya que la energía del grupo sobre un escenario resultaba incomparable. Esta llamarada capta perfectamente el fin de los sesenta, la radicalización social y la revuelta musical que estaba empezando.