La interpretación de Melissa McCarthy la redime de todas las comedias infumables de su carrera
24 feb 2019 . Actualizado a las 08:26 h.Basada en las memorias de Lee Israel, ¿Podrás perdonarme algún día? es una de esas películas de la que no esperas mucho antes de que se apague la luz pero que paladeas con afecto a medida que avanza entre las sombras. La historia de Leonore Carol Israel es una crónica del triunfo en la derrota, de la belleza áspera del perdedor. Tras entrevistar a muchos artistas para Esquire, su personalidad bronca y amargada la fue apartando de cualquier trabajo y aunque en principio se vendieron bastante bien algunas de las biografías que escribía, con los años se encontró arruinada y sola, en la cincuentena, ignorada por su agente y sin dinero. Para sobrevivir, vendió una carta de agradecimiento dedicada por Katharine Hepburn y entonces se le ocurrió falsificar una tras otra, hasta cuatrocientas que colocó en librerías de viejo para coleccionistas.
Las falsas misivas de Noël Coward, Fanny Brice, Dorothy Parker o Lillian Hellman eran tan buenas que algunas se citaron como reales en célebres estudios. Un día, el FBI se le echó encima y todo se acabó. Es muy hermosa esa secuencia en la que la acusada se defiende ante la Corte: «Es la única vez en que me sentí orgullosa de mi trabajo».
Lee era alcohólica y lesbiana; el amor de su vida la abandonó «por tanta tristeza»; su gatita se murió y su único amigo, un traficante homosexual, la traicionó. Vemos toda esa sórdida aventura urbana representada cálidamente en los bares y garitos del Village -los auténticos por los que la protagonista vagabundeaba- y palpamos la sensación de arrobo y melancolía.
Junto a la también notable encarnación de Richard E. Grant -como el amigo de Lee-, el trabajo de Melissa McCarthy es merecedor de todos los premios del mundo, incluido el Óscar para el que está nominada y que, desgraciadamente, no obtendrá frente a la dura competencia de Glenn Close. McCarthy es intérprete de comedias tan infumables como Cuerpos especiales o Tammy, pero su transformación aquí, amarga, malhumorada, decepcionada, la redime para siempre. Y es muy inteligente el paralelismo que la directora Marielle Heller establece entre el personaje y la agria mayor Bette Davis, a la que nuestra protagonista observa en la tele, declamando de memoria los diálogos de La loba.
«¿PODRÁS PERDONARME ALGÚN DÍA?»
[«CAN YOU EVER FORGIVE ME?»]
EE.UU., 2018.
Directora: Marielle Heller.
Intérpretes: Melissa McCarthy, Richard E. Grant, Dolly Wells, Jane Curtin, Ben Falcone, Anna Deavere Smith, Stephen Spinella.
Drama.
106 minutos.