Una jueza contra el sistema, biopic sobre Ruth Bader Ginsburg

Miguel Anxo Fernández

CULTURA

Fotograma del filme «Una cuestión de género»
Fotograma del filme «Una cuestión de género»

La directora Mimi Leder aborda en «Una cuestión de género» la vida de una jurista pionera en Estados Unidos en la lucha por la igualdad legal entre hombres y mujeres

03 mar 2019 . Actualizado a las 08:58 h.

Por un lado, la ejemplar biografía de la jueza Ruth Bader Ginsburg, abanderada contra la discriminación de género y la segunda en la historia de su país en ocupar plaza en el Tribunal Supremo, por designación de Bill Clinton. Por otro, Mimi Leder, señora de oficio incuestionable, sobre todo en el medio televisivo y debutante en la pantalla grande una década después con El pacificador (1997), aunque siga prefiriendo la pequeña. Confluyen en Una cuestión de género dos vectores: recrear un biopic que transcurre entre los años 50 y 70 del pasado siglo, y servirlo con una corrección que condicionará el resultado. Mientras la trayectoria de Ginsburg tiene un punto apasionante, Leder prefiere actuar de oficio sin descartar lugares comunes y coquetear por momentos con el producto destinado a la sobremesa familiar. El resultado es un déjà vu sin menosprecio del trabajo de Felicity Jones, la exquisita ambientación y, naturalmente, la cruzada personal de una señora frente a lo que era una injusticia de ley.

La primera abogada formada en Harvard es como una Quijote cuyos molinos de viento son una sociedad machista, fuertemente anclada en la tradición que reserva para la mujer el destino prioritario de madre. Más allá de su brillante expediente como alumna y de tener como pareja a un colega que comparte su misma lucha, la utilidad de la película está en rescatar del olvido -o, si se prefiere, mostrar una percha para ejemplarizar ante una audiencia saturada y olvidadiza- que el mundo es susceptible de mejoría y que los logros en avances sociales no son cosa de hadas y de varitas mágicas. El guion tiene la virtud de no santificar a esta mujer, de retratarla como un ser común aunque obstinada en una idea.

El filme alcanza momentos óptimos en lo que concierne a la relación de la jueza Ruth con su hija, aunque no consigue que nos vengamos arriba cuando toca defender su postura ante el alto tribunal en la secuencia cumbre, porque Leder lo sirve con la rutina del buen oficiante (como es su caso). Entramos en la sala, sin saber nada de Ginsburg. Salimos sabiendo de ella. Y punto.

«ON THE BASIS OF SEX»

EE. UU., 2018.

Directora: Mimi Leder.

Intérpretes: Felicity Jones, Justin Theroux, Sam Waterston, Kathy Bates, Armie Hammer, Jack Reynor.

Drama.

120 minutos.