«De no haber sido cantante tendría que haber sido obispo 'pa' predicar o político 'pa' gritar mentiras»

CULTURA

Jerónimo Granda
Jerónimo Granda

El Cantautor Jerónimo Granda actúa el viernes y el sábado en el Teatro del Barrio, en Madrid

08 nov 2019 . Actualizado a las 10:46 h.

Jerónimo Granda cruzará el Pajares para actuar en Madrid el 8 y 9 de noviembre en Teatro del Barrio. Granda es uno de los mejores cantautores satíricos, por no decir el mejor, de este país y el año pasado cosechó un éxito absoluto en su visita a la capital. Jero es un referente en Asturias, una de esas joyas que custodiábamos en nuestra tierra, pero que ya es hora de que pueda ser venerado por todo el mundo.

Entre ensayos, preparativos y últimos retoques, el cantante asturiano sacó un hueco para charlar con este periódico.

-A usted le definen como cantante, cómico, cantautor satírico, juglar, bufón, referente, azote del poder, Maestro. ¿Cómo se define Jerónimo Granda?

-Yo hace muchos años que me definí como cantamañanas , porque siempre cantaba de noche y de madrugada. Tampoco ye tan gordo lo que canto y lo que hago. La gente es la que te bautiza, ponen nombres a la gente, y, ante esto, yo no puedo hacer nada.

-Casi actúa más en la capital de España que en Asturias.

-Yo ya soy un artista amortizau, pero bueno, siempre que alguien me llama a un sitio voy y canto. Igual me da cantar en Madrid que en Nueva York.

-Después de llenar el año pasado el Teatro del Barrio, esta vez actúa dos días seguidos. ¿Cómo prevé que será la acogida del público?

-Pues depende si llueve o no, mil coses. Ahora que son elecciones, igual la gente va a rezar el rosario en vez de veme a mí, pa que ganen los de ellos y esas coses tan rares que haz la gente cuando hay elecciones. Hay gente pa todo

-Muchos van a verle como si fueran a escuchar al Mesías.

-No fastidies, Mesías no quisiera yo ni pareceme. Salvapatrias nada, eso ye pa cuatro visionarios.

-¿Ha nacido para estar encima de un escenario?

-Yo creo que sí. Mira, de no haber sido cantante, tendría que haber sido obispo o algo así, para estar predicando desde una tarima o un púlpito o cualquier lao. O político pa estar gritando tol día mentiras.

-¿Sigue poniéndose nervioso antes de cada actuación?

-Tremendo, ye una cosa que no tiene explicación. Pasa a tol mundo, pero ye así.

-Con la cantidad de gente que se va de nuestra región, ¿es Madrid la nueva capital asturiana?

-Ye un poco exagerao, ye una manera de hablar. Pero sí que hay mucha gente que se fue de aquí.

-¿Qué está pasando en el Principado?

-Estos días va a llover, yo más allá no llego. Los análisis políticos, económicos y sociales se me escapan. Pero no veo luz en el final del túnel, la única luz parece la del Negrón cuando llegas a León. Es lo de siempre, veo todo muy anodino. Hay una falta de inteligencia absoluta en los que mandan, en los que dirigen esto, y lo pagamos los de abajo, los currantes. No quiero con esto quitar la parte de culpa que nos toca a los que elegimos a esos que ostentan el poder.

-¿Qué opina de la cooficialidad del asturiano?

-No te sabría decir, porque todo lo que sea idiomático, ya sea en Cataluña o en Quebec, trae problemas. Ahí discuten los lingüistas, los economistas, los políticos, barriendo cada uno pa su casa. A mí no me molesta en absoluto, aquí tenemos un pequeño idioma, de poco alcance, y a mí préstame que se cultive y se mantenga. Lo que pasa que luego hacerlo oficial sería caro, complicado y llevaría mucho tiempo, no de un día pa otro, tien que ir despacio.

-¿Con el problema catalán se romperá España?

-¿Más todavía? España siempre estuvo rota, no ye de ahora. Aquí cada uno siempre tiró pa lo suyo. Esto era un territorio dividido en reinos y condados, hasta que alguien lo juntó para sus intereses y el pueblo a velas venir.

-La crítica a la monarquía es un tema angular y recurrente en sus canciones. Y cada día que pasa parece que se lo ponen más fácil.

-Ya me repuna un poco el tema de la monarquía, porque por cualquier cosa la gente te pone etiqueta. Yo tiro pa muchos sitios, métome con muches coses. Yo hice algunas canciones contra la monarquía, y ahora la gente cree que ando derrocando coronas.

-¿Quién, o qué, será el oso que se coma a los Borbones?

-Ellos solos, como una madera vieja que se va pudriéndome poco a poco. Salvo que haya un incendió y queme la cuadra.

-Aunque el poder cambie de manos, ¿siempre mandan los mismos?

-Creo que sí. Aunque no los mismos, más bien unos pocos. Los poderosos, a veces, arruínense y discuten, puede cambiar, pero cambia por arriba. Por abajo nada, por abajo lo cambia sólo una revolución.

-¿Se considera un provocador?

-Me considero un observador

-¿Existen los límites del humor?

-No, creo que no. El humor ye el humor, no tien otra función. Cantando no se resuelve la fame en el mundo y con el humor tampoco.

-¿Le han censurado o vetado?

-No, nunca. No que yo sepa o me haya enterado.

-¿Alguna vez se ha mordido la lengua?

-Pude mordeme la lengua pa no decir una barbaridad, una cosa muy fuera de lugar. Pero no, no con lo que yo haya manifestado o piense de algo.

-¿Se están jodiendo las libertades en este país?

-En este país y en tol mundo. Este país no ye tan importante como creen algunos, esto ye un cachu prau perdido. Ta tol mundo igual. Ahora el poder, además de tener el poder, se te ríe a la cara y se quedan tan panchos.

-Tuvo una educación católica con los frailes, ¿es usted de pecar mucho?

-No, ni ahora ni antes. Además, el pecado sólo existe en el mundo occidental, la culpa sólo existe en los herederos de la Biblia. El pecado ye un cuentu, habrá coses que estén bien y otros mal, pero nada de pecados.

-¿Es muy diferente el Jerónimo Granda actual al de los inicios?

-Sí, claro que sí. No tengo nada que ver, somos muchas personas distintas y un sólo dios verdadero. Todos tenemos tres personajes: infancia, madurez y vejez. Soy la Santísima Trinidad, somos todos el Espíritu Santo, todos somos tres en uno.

-¿Quiénes son sus referentes en esta vida?

-Todo el mundo es importante, no sabría decirte unos nombres determinados. Todo el mundo que ha pasado a lo largo de mi vida, todos tienen influencia. El ser humano ye una esponja que absorbe, unas veces más y otras menos, todo lo que ocurre a su alrededor.

-¿Le ha abrumado la fama?

-No, porque tampoco ye tanta. Así estoy muy contento, soy un poco conocido y eso es suficiente. Tengo que decite que aquí en Asturias la gente ye muy discreta pa eso.

-¿Echa de menos salir en la TV?

-Siempre se echa de menos lo pasado, porque uno era más joven, más dinámico. Pero yo creo que va más en función de la edad que de otra cosa. Echo de menos, cuando no estoy encima, el escenario. La televisión lo que tiene es una repercusión mayor, te ve  más gente, y la gente cree que cuando sales en la tele yes mejor y tienes mucho dinero y triunfaste. Todo esto ye mentira, un suponer, todo al cocer mengua.

-Sus últimos discos son de 2018, ¿sigue componiendo y creando música?

-Siempre se escribe algo, pero de ahí a que salga algo, pueden pasar años

-¿Piensa en retirarse alguna vez?

-Mientras haya voz y no pierda la cabeza, pues sí, seguiré. El escenario es lo que me da la vida, lo que me motiva. Voy a cantar y contar histories hasta que pueda, ye lo más guapo del mundo.

-Lleva más de medio siglo dedicado a la música, ¿es usted un virtuoso o un obrero?

-De virtuoso nada, no tengo nada, ni pa la guitarra ni pa la voz tengo. Soy un currante, un bregador de esto. Virtuosos hay muy pocos, y muchos no lo son y se lo creen.