El filme solo presenta las cenizas de la comedia clásica norteamericana
26 ene 2020 . Actualizado a las 09:57 h.Con callo en los ojos y más de cincuenta años de cinefilia, entre las variadas razones que nos impulsan a ver una película todavía hay algunas que obedecen al capricho más excéntrico. Ya lo decía aquel astuto y abusivo rajá del show business llamado Louis B. Mayer: «Si conociera todos los motivos que llevan a la gente a gastarse el dinero en el cine sería el rey de este negocio -le llamaban el Zar de todos los rushes-, pero lo que sí sé es que algunos de esos motivos son verdaderamente estúpidos».
Sintiéndonos así, estúpidos, como nos sugería el viejo elefante carnívoro de la Metro -a su entierro la gente fue para asegurarse de que realmente estaba muerto- nos hemos tragado una píldora que se titula Jugando con fuego y, ahora que lo pensamos, el título no podía ser más premonitorio. Atraídos por el humo de dos actores que nos suelen divertir -son legión, nuestras debilidades de cinéfilos- nos hemos encontrado que no había ni fuego ni rescoldos, solo las cenizas de la comedia clásica americana. Los grandes John Leguizamo y Judy Greer están patéticos aquí, el primero empujado a una autoparodia de sus peores vicios, largando refranes sin gracia, y la segunda reducida a comparsa del cachas John Cena, ex luchador de wrestling metido a remedo de actor con cara de piedra. Por si fuera poco, los infantes de la función hacen buena aquella parte de la conocida recomendación de Hitchcock: «Nunca trabajes con niños, perros o con Charles Laughton».
Jugando con fuego tiene todo lo peor de las sitcom televisivas actuales -hoy, pocas son brillantes-, blandas, inanes, adocenadas, de mal gusto. La gracia de cruzar cuatro bomberos forestales -«no somos bomberos, somos aéreo brigadistas»- con tres huerfanitos rescatados del fuego, exigía echarle gasolina a la imaginación. Pero las gamberradas de los angelitos y la insolencia de la adolescente -el sarcasmo de Brianna Hildebrand es lo único que, en algún momento, se sale del bochorno- inciden en lo más obvio y barato, como es habitual en su director -Superpoli en Las Vegas, Papá por sorpresa, Abuelos al poder o Ella es el chico-, acostumbrado a máximas como la que oímos aquí: «Los niños son como incendios, no se pueden controlar, tienes que contenerlos hasta que se agoten solos». ¡Huyamos!
«JUGANDO CON FUEGO»
[«PLAYING WITH FIRE»]
EE.UU., Canadá, 2019.
Director: Andy Fickman.
Intérpretes: John Cena, Brianna Hildebrand, John Leguizamo, Keegan Michael-Key, Judy Greer, Dennis Haysbert, Tyler Mane, Finley Rose Slater, Christian Convery.
Comedia.
95 minutos.