«Hunters»: Sangre y sed de venganza contra los nazis

CULTURA

Christopher Saunders

La sombra del holocausto, la estética pop y referencias a Tarantino confluyen en el nuevo «thriller» de Amazon Prime protagonizado por Al Pacino

21 feb 2020 . Actualizado a las 08:51 h.

Ojo por ojo. Diente por diente. ¿Qué pasaría si un grupo organizado de judíos pudiera vengarse de los genocidas que los torturaron? ¿Tendrían derecho a saltarse los mecanismos de la justicia? ¿Matar criminales nazis cuenta como asesinato? Para Meyer Offerman no. El escarmiento es para él un mandato, un toque de atención para evitar que la historia más oscura vuelva a repetirse. Offerman es el adinerado magnate encarnado por Al Pacino que mueve los hilos de Hunters, un thriller de diez episodios que este viernes llega a Amazon Prime. Él trabaja por su cuenta, pero dice representar a «seis millones de clientes» que no tuvieron la oportunidad de defenderse.

En Hunters el sadismo del holocausto se encuentra con la cultura del cómic y la estética pop en manos de una fraternidad judía que ajusta cuentas con los nazis que viven clandestinamente en Estados Unidos y siguen defendiendo el supremacismo desde la sombra. Ellos creen que la lucha no ha terminado, que «solo los muertos conocen el fin de la guerra». «Nosotros todavía estamos aquí, por todas partes», afirman mirando a la cámara los monstruos que duermen bajo la cama.

En sus dos primeros episodios, la serie no disimula sus referencias a Quentin Tarantino y sus Malditos bastardos, aunque aquí traslada a los ejecutores del campo de batalla europeo a una Nueva York de los años setenta. Violencia cruel con toques de comedia negra es la gratificación que recibirá el espectador que espere ver sufrir a los discípulos de Hitler con torturas tan despiadadas y elaboradas como las que ellos mismos perpetraron. El creador de la serie, David Weil, la concibió a partir de las historias de buenos y malos que su propia abuela le contaba de pequeño sobre su propia supervivencia en Auschwitz.

El arranque de la historia sigue a Jonah Heidelbaum, un joven judío que vive con su abuela hasta que una noche un extraño la asesina en su propia casa. No es un ladrón. El crimen oculta algo más profundo que Jonah, tan inteligente como novato, todavía desconoce. Una serie de sucesos lo llevarán a descubrir que los criminales nazis habitan por todas partes, pueden ser vendedores, pediatras, científicos de altos organismos y camuflados miembros del gobierno.

La serie arranca con un primer episodio que se toma 90 minutos no solo para abrir el foco sobre todas sus tramas y personajes. También lo hace para que el vengador Al Pacino pueda justificarse con un largo monólogo. «Si llegamos a casa y vemos que nuestros asesinos son nuestros vecinos, ¿qué debemos hacer? ¿Estrecharles la mano? ¿Hacer que no los vemos?», se pregunta.