Las irlandesas Yvonne Farrell y Shelley McNamara, premio Pritzker 2020

Xesús Fraga
X. Fraga REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Yvonne Farrell y Shelley McNamara
Yvonne Farrell y Shelley McNamara pritzker

El jurado distingue su compromiso con el medio ambiente y su capacidad para combinar un lenguaje cosmopolita con las particularidades locales

04 mar 2020 . Actualizado a las 08:59 h.

Las arquitectas irlandesas Yvonne Farrell (Tullamore, 1951) y Shelley McNamara (Lisdoonvarna, 1952) se conocieron mientras estudiaban la carrera y, de alguna manera, lo educacional ha marcado su trayectoria. Los proyectos de carácter docente y social, con énfasis en los aspectos más comunitarios de la arquitectura, son una constante en una visión compartida desde su estudio conjunto, Grafton, y que fue distinguido este martes con el premio Pritzker correspondiente al 2020.

Las dotaciones educacionales destacan en la trayectoria de ambas profesionales, que arranca a finales de la década de los setenta del siglo pasado. Desde escuelas para las primeras etapas formativas hasta campus universitarios, pasando por construcciones para cometidos sectoriales o especializados, la creación de un entorno favorable para alumnado, docentes y comunidad ha sido una de las preocupaciones de Farrell y McNamara.

El Urban Institute de Irlanda
El Urban Institute de Irlanda ros kavanagh

Medio ambiente

El jurado valoró en su fallo la integridad que han demostrado a la hora de encarar sus proyectos, su generosidad y apuesta por la colaboración profesional y un compromiso firme con la excelencia de la arquitectura. También destacó una actitud responsable con respecto al medio ambiente, además de su capacidad para entender e interpretar las particularidades del lugar concreto donde proyectan, sin por ello renunciar a un talante cosmopolita.

Un ejemplo de ello es la influencia que la orografía y el paisaje de su Irlanda natal ha ejercido en su interpretación arquitectónica, y de la que han sabido valerse para trabajar en lugares en apariencia muy distintos: el emplazamiento del campus UTEC de Lima, al borde mismo de un precipicio, ilustra esta sensibilidad, a la vez que dialoga con su propio espacio y se vale de las condiciones climáticas locales en beneficio de sus usuarios.

Campus universitario UTEC de Lima
Campus universitario UTEC de Lima Iwan Baan

«La arquitectura es un marco para la vida humana»

Farrell y McNamara celebraron la concesión del Pritzker, considerado el galardón más alto al que puede aspirar un arquitecto, y en cuya nómina se encuentran Arata Isozaki -ganador en la edición anterior-, Rafael Moneo, Zaha Hadid, Álvaro Siza, Eduardo Souto de Moura, Niemeyer, Johnson, Aldo Rossi y Gehry, entre otros.

Las arquitectas irlandesas también pudieron reflexionar y comunicar el ideario que informa sus proyectos. «En numerosas ocasiones nos ha costado encontrar el espacio adecuado para implementar valores como el humanismo, las destrezas, la generosidad y una conexión cultural con cada lugar y contexto en el que trabajamos», explicó McNamara en el comunicado que acompañaba la noticia del galardón. Ambas profesionales agradecieron las oportunidades que supusieron los encargos de sus clientes para llevar a cabo esa visión.

Responder a necesidades

Farrell también añadió matices a la filosofía de trabajo de su estudio. «Lo que buscamos en nuestros proyectos es ser conscientes de los diversos niveles de ciudadanía y tratar, desde la arquitectura, de que responder a sus necesidades de forma simultanea, algo que contribuye a mejorar las relaciones». En este sentido, un edificio universitario en Milán -Universita Luigi Bocconi- no solo buscar servir los propósitos de sus usuarios sino entablar un diálogo con la comunidad. De forma más abstracta, la Escuela de Económicas de Toulouse, que hace un uso extensivo del hormigón y de piedra de una cantera próxima, se relaciona con su entorno convirtiéndose en metáfora de una ciudad llena de puentes, muros y torres de piedra.

El Pritzker también ha valorado cómo ambas arquitectas no han perdido de vista la escala humana en sus proyectos: «La arquitectura es un marco para la vida humana».