«La posesión de Mary», un filme de terror a la deriva y con vías de agua

miguel anxo fernández

CULTURA

La película, realizada por el veterano director de fotografía Michael Goi y protagonizada por Gary Oldman, estrenada en Estados Unidos el pasado año, ha tenido una acogida crítica y comercial muy discreta

02 jul 2020 . Actualizado a las 09:08 h.

Veamos algunos datos objetivos. El título original del filme es Mary y, de haberlo mantenido para el estreno español, ganaría unas décimas de suspense previo, ya que desde el minuto uno sabemos que el barco Mary está poseído y el espectador va siempre por delante de los navegantes.

El director Michael Goi, veterano director de fotografía, sobre todo en series e incluso como director de algunos episodios en varias de ellas, afirma disponer de una colección de casi veinte mil filmes, lo que lo confirma como cinéfilo consumado, aunque visto el resultado de su segundo largometraje, pareciera haberse quedado en las carátulas…

Finalmente, Gary Oldman, Óscar por la película El instante más oscuro (2017), aceptó protagonizarla al caerse Nicolas Cage, que, vista su dudosa trayectoria desde hace años, habría encajado mejor en el naufragio. Pero conste que tanto Oldman como Emily Mortimer en todo momento están profesionales, hacen como que se creen ir a bordo de un barco endemoniado. Quizás Goi -que también pone la fotografía- haya pretendido salirse del terror descacharrante, sobrado de tomatina y otros recursos queridos al entorno fan entre combos de palomitas. Pero no.

O puede que su intención fuera escorarse al misterio, al suspense. Y no le salió.

Oldman es un apasionado de la náutica que se curra las lentejas como asalariado, llevando un barco de recreo. Sueña con poseer una nave y organizar sus propias rutas. Por eso no lo duda cuando acude a una subasta y ve arrinconado un viejo velero con la tira de años a cuestas.

Su esposa desconfía y más todavía cuando descubre algunos hechos terribles vinculados a su trayectoria. Todo eso en su primera media hora, con lo cual el resto del metraje va a la deriva con numerosas vías de agua en el guion.

Realmente desde que Goi nos enseña la proa del barco -una suerte de envejecida sirena de madera-, y la reitera con regularidad, ya todo desprende un fuerte olor a chamusquina.

La cinta es precovid, tuvo su estreno a finales del pasado año en su país, Estados Unidos, en parte por el gancho de Oldman, pero su acogida crítica y comercial fue muy discreta. Y es que, además, a las películas de barcos inquietantes se les agotó la chispa.

«MARY»

Estados Unidos, 2019.

Director: Michael Goi.

Intérpretes: Gary Oldman, Emily Mortimer, Manuel García-Rulfo, Chloe Perrin, Stefanie Scott, Jennifer Esposito, Natalie Jean, Michael Landes.

Terror.

84 minutos.