Ramón Lluís Bande estrena «Vaca mugiendo entre ruinas», un ensayo cinematográfico sobre el Consejo Soberano de Asturias y León creado durante la Guerra Civil
21 jun 2021 . Actualizado a las 08:56 h.El 24 de agosto de 1937 se proclamó en Gijón el Consejo Soberano de Asturias y León, una respuesta institucional de los partidos de izquierda al aislamiento de la zona como consecuencia del cerco de las tropas franquistas. La caída del norte, en octubre del mismo año, implicó su desaparición y su cobertura por un manto de silencio y desmemoria.
Vaca mugiendo entre ruinas, un ensayo cinematográfico del escritor y director Ramón Lluís Bande (Gijón, 1972) que se estrena este viernes en Numax, recupera la historia del Consejo. El núcleo central del filme lo constituye una secuencia de planos fijos de fotografías tomadas principalmente por Constantino Suárez y que actualmente custodia el Museo del Pueblo de Asturias. Otra contribución importante es la obra del pintor Nicanor Piñole: uno de sus grabados le presta su título a Vaca mugiendo entre ruinas. El orden cronológico y la narración a cargo del músico Nacho Vegas, que lee textos de la institución, noticias de la época y otros documentos, proponen un acercamiento de objetividad casi pura a la reconstrucción de la actividad del Consejo.
«La película no quiere llegar a conclusiones, ni condicionar el significado que pueda tener para cada espectador», avanza Bande. «Como decía Walter Benjamin, "Nada que decir. Solo mostrar"», añade el cineasta, quien trabajó motivado por dos preguntas: «Por qué nos robaron ese momento trascendental de nuestra historia? ¿Qué pasa cuando esta historia, contada de esta manera, entra en contacto con nuestro presente?». Su opinión personal es que el relato de lo que supuso el Consejo y la memoria de aquel tiempo habría convertido en imposible la Transición tal y como se planteó al morir Franco.
Armas y «madreñes»
Además de reconstruir una historia colectiva, el visionado de Vaca mugiendo entre ruinas propone un viaje directo a aquella época. No se trata solo de ideas políticas y contiendas bélicas. También hay rostros, vestimentas, paisajes. Y combinaciones como la de ver a milicianos con rifle y zuecos. «Todas las imágenes de Constantino Suárez comparten mucha información sobre las condiciones de vida de los protagonistas de la resistencia antifascista, más allá incluso de su participación en la guerra», confirma Bande. «Ir al frente en madreñes es una imagen icónica que resume una idea importante: un pueblo en armas».
El paisaje, natural y urbano, intervienen para apartar la película de un documental al uso. Un prólogo que muestra el encuentro de las nubes y las montañas, rodado en el Mazucu, escenario de batalla, y una coda con el centro de Gijón en la actualidad, abren y cierran un relato que trasciende el tiempo: «Ponen en relación la historia con nuestro presente, algo muy importante siempre en mi cine», afirma Bande. «Creo profundamente en la capacidad del cine para resignificar políticamente el paisaje. El paisaje guarda siempre la memoria política de su pasado», concluye.