Rahm, contra el estigma del debut

Paulo Alonso Lois
PAULO ALONSO LOIS REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Darren Carroll | AFP

Desde 1979 nadie consigue el Masters en su primer intento, pero el jugador vasco figura sexto en las apuestas para ganar en Augusta en su estreno

03 abr 2017 . Actualizado a las 08:26 h.

«Yo puedo si hay con qué. Lo voy a lograr. Depende de mí». El mensaje recordatorio de Kiko Luna, seleccionador español juvenil, entró en el teléfono de Jon Rahm poco antes de la final del Mundial match play. En realidad, la misma filosofía de siempre, que le había inculcado desde los 13 años en los equipos nacionales y de los 16 a los 18 en la Blume. Frases que actuasen como refuerzo para un jugador con una determinación absoluta desde crío. Esa ambición sitúa al deportista vasco sexto en las apuestas del Masters de Augusta, pese a que el torneo, tradicionalmente, penaliza a los debutantes. Excluidas las dos primeras ediciones, el único en vencer en su primer intento fue Fuzzy Zoeller en 1979.

«Tiene carácter y es ambicioso, como todos los genios. Si no le salen bien las cosas, se calienta, pero sabe canalizar esa furia para ser mejor y eso es lo que le hace tan grande. Muchos jugadores le pegan bien, pero pocos creen tanto en sus posibilidades. A Jon no le asustará verse ahí en el Masters», razona Kiko Luna ante el estreno de Rahm el jueves. «Está para pelear por el título, por supuesto. Todo lo que hace lo enfoca para ser el mejor», añade sobre sus posibilidades, ya aupado al puesto número 14 del ránking pese a contar solo con 19 torneos, frente a los 49 de Dustin Johnson, por ejemplo.

«Si vas a Augusta con miedo, es un campo que te puede llegar a asustar. Pero una de las características de Jon es su valentía», explica el profesional Nacho Gervás, con más de 20 presencias en el Masters como espectador y comentarista de televisión. «Jordan Spieth fue segundo en su debut en Augusta y ganó en la siguiente visita. Jon también tiene varios puntos a su favor para rendir allí: es bueno con el putt, le pega muy largo, suele ir muy recto y consigue buenos tiros a bandera. Y, por encima de todo, mentalmente es muy fuerte. Juega a ganar, no a evitar el fallo».

En la primera de sus cuatro presencias en Augusta, donde llegó a liderar el torneo en el 2011, Álvaro Quirós falló el corte. «Yo jugué allí por primera vez en esa semana del torneo. Así que competí demasiado pendiente de calcular y medir cosas, y no de jugar. Jon tiene a su favor que ya conoce el campo, porque ha ido hace unas semanas», explica el profesional gaditano, pero añade un matiz que complica al debutante: «El campo se transforma para el jueves que comienza el torneo. En Augusta pueden ajustar la dureza de los greenes a su antojo y todo cambia radicalmente respecto al recorrido que creías conocer».